Una usina de contenidos, propuestas, ideas y actividades
Con éxito se está desarrollando desde el sábado y se extenderá hasta el venidero viernes una nueva edición, la número 18, de la Feria del Libro.
«Si el libro no existiera habría que inventarlo», planteó el subsecretario de Cultura y Educación, César De Gerónimo, en la apertura de la 18ª edición de la muestra que por primera vez tiene como uno de los sitios elegidos el «hall» central del Palacio Municipal, que fue acondicionado con buen gusto y estilo para hacerla mucho más cálida y confortable.
Presentaciones de libros, presencia de editoriales y librerías, talleres, narraciones, proyecciones y disertaciones de escritores son algunas de las múltiples actividades que contiene la feria que en sus dos primeras jornadas contó con una elevada presencia de público.
No se descubre nada cuando uno dice que el libro es transporte de ideas además de permitir llevar el pensamiento de una persona a través del tiempo, de una generación a otra. Dijo Jorge Luis Borges: «Estoy mas orgulloso de los libros que he leído de los que he escrito».
Feliz por la repercusión de la Feria, De Gerónimo sostuvo que «el libro es un desarrollo tecnológico que está perdurando más que muchas otras tecnologías que surgieron después. Es un vehículo de conocimiento. Además de ejercitar el vocabulario nos permite reconocernos, reconocer el exterior de nosotros mismos como también la diversidad, otros idiomas y culturas».
También dedicó un párrafo especial para los libreros. «Su tarea es difícil pero necesaria» afirmó resaltando el esfuerzo concretado por muchos de ellos para exhibir sus materiales en la feria.
ACTIVIDADES
En la jornada inaugural hubo momentos vividos con intensidad. Uno de ellos durante la presentación que realizó el periodista, conductor y productor Gerardo Rozín, acompañado por el talentoso músico y cantante Hugo Dellamea, de la propuesta denominada «Canciones en el botiquín». Durante algo más de noventa minutos, su relato y la música cautivaron al público que colmó el lugar.
«Hablamos de lo que las canciones hacen con nosotros», apuntó Rozín a El Diario. (ver aparte)
Posteriormente, en la «Sala de los Intendentes», el periodista, profesor de Historia y escritor Ariel Bibbó presentó su sexto libro denominado «Incorruptible», obra inspirada en el doctor René Gerónimo Favaloro.
Feliz y emocionado se lo vio al escritor que con mucho esfuerzo personal pudo presentar este nuevo trabajo que se suma a otros sobre Eva Duarte, Héroes de Malvinas, Raúl Alfonsín y Juan Manuel Fangio.
La obra biográfica narra en su totalidad los aspectos más importantes de la vida del médico rural, cuyos aportes documentales provienen de amigos y la propia familia. Analiza también el legado familiar, la educación proveniente de una familia humilde, la formación académica y profesional, el paso por Jacinto Aráuz, Estados Unidos y la creación de la Fundación junto al triste final. Cada capítulo de los trece que componen el nuevo trabajo, están contrastados con testimonios que hacen más rica la historia.
«Incorruptible es el término que define a René Favaloro, claro ejemplo de patriota, educador, humanista y hombre de bien», señaló Bibbó quien acotó que «a Favaloro lo mató la corrupción de este país a la que tanto denunció y atacó».
Ayer continuaron las presentaciones de libros en el Palacio Comunal. Dino Dimasi dio a conocer su obra literaria «Podría abrirse el cielo», Héctor Fuentes presentó «Rueda la pelota», Ezequiel Feito hizo lo propio con «Noche trasfigurada», Eugenia Zicavo con «Feminismos: ¿Desde cuándo y hasta cuándo? Y Daniel Frescó con «Manu Ginóbili, el héroe que derivó en maestro».
El cierre de la jornada se produjo con un homenaje a José Hernández en adhesión al Día de la Tradición que se conmemoró ayer.