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Después de tres jornadas consecutivas de protesta en el relleno sanitario, los trabajadores recicladores de Balcarce, agrupados en la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACCyR) y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), anunciaron la suspensión de la medida de fuerza. La decisión fue tomada tras concretarse una reunión con el intendente Esteban Reino, quien accedió a conformar una mesa de diálogo y manifestó su voluntad de sostener todas las fuentes laborales.

En el encuentro, que se desarrolló este jueves, las familias recicladoras trasladaron al mandatario local la urgencia de poder volver a trabajar en la planta municipal, situada dentro del predio del basural. Denunciaron que actualmente el lugar se encuentra colapsado por la acumulación de residuos, como resultado -según señalaron- de años de deficiente gestión del sistema de reciclado a nivel local.

Desde los movimientos que impulsaron la protesta informaron que el levantamiento de la medida se resolvió luego de que Reino afirmara estar de acuerdo con que la planta sea operada por las dos cooperativas existentes en Balcarce. Además, se comprometió a recibirlas el próximo lunes 14 de julio a las 12 en conjunto con el secretario de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, Gustavo Torres, para coordinar la puesta en funcionamiento de la planta y avanzar en la firma de un convenio formal de trabajo.

A pesar de la tregua, los recicladores advirtieron que se mantendrán en estado de alerta y movilización hasta que el compromiso se materialice. En un comunicado difundido este jueves, expresaron: "Esperamos que el Intendente cumpla con su palabra y que entre todos y todas podamos construir un Sistema de Reciclaje Local que dignifique y reconozca el trabajo cartonero, que otorgue derechos para el sector, que reduzca la cantidad de reciclables que van a entierro alargando la vida útil del predio de disposición final, y que por sobre todas las cosas cuide el medio ambiente de las generaciones futuras de la comunidad de Balcarce".

El mensaje final no dejó dudas sobre el rol central del sector en la política ambiental local: "Sin cartonerxs no hay reciclado".