«Dicen que los santos son más admirables que imitables, pero San José es imitable porque es un trabajador»
Este miércoles, en la celebración de las fiestas patronales por San José, Balcarce recibió la visita del Mons. Ernesto Giobando quien es el administrador Apostólico de la diócesis de Mar del Plata a la que pertenece nuestra ciudad.
Giobando se encuentra en forma interina en el cargo, tras la renuncia a asumir como obispo Mons. Gustavo Larrazábal el pasado mes de enero.
Minutos antes de la realización de la procesión, que contó con la participación de fieles e instituciones de la ciudad, Giobando habló con El Diario sobre su visita a Balcarce, la figura de San José y su rol como administrador Apostólico de la diócesis.
PRIMERA VEZ
Las fiestas patronales de San José marcaron la primera vez que Giobando visitó Balcarce, en ese sentido y sobre la ciudad, manifestó: «estoy conociendo la ciudad de Balcarce. Pasé siempre, pero lo hice por la ruta, nunca había ingresado. Es impresionante, es una flor de ciudad. La iglesia es muy linda, todo lo que tiene que ver con la plaza. Es una verdadera ciudad como su nombre así lo indica, del Balcarce que es tan conocido en Argentina, en la Provincia. Estoy muy contento de estar aquí acompañando la fiesta de San José. En otra oportunidad retornaré para hacer una visita y quedarme unos días».
SAN JOSÉ
Hablando sobre el patrono de Balcarce, San José, Giobando remarcó: «San José es el gran patrono de la Iglesia católica. Es su patrono universal. Personalmente tengo una devoción por él, porque yo soy de Santa Fe y fui al Colegio Primario de las Hermanas de San José. Así que nos enseñaron y nos hicimos devotos desde el preescolar en aquella época».
Rememorando sobre su historia, Giobando agregó: «luego como jesuita, soy jesuita, estuve en el Colegio Máximo de San José. Ahí con el Padre Bergoglio, fue el primer párroco de la Parroquia de San José y trabajé allí 12 años. La parroquia lleva el nombre: ‘Parroquia del patriarca San José’».
FIGURA MUNDIAL
Analizando a la figura de San José a nivel mundial, Giobando resaltó: «es el esposo de la Virgen, es quien se hace cargo de esta situación en la que estaba María, se hizo cargo de la familia. Fue un varón que se hace cargo de una familia sabiendo que es el padre adoptivo de Jesús, pero realmente fue un padre. Como dice el Papa Francisco fue ‘un corazón de padre’.
MENSAJE
Dejando un mensaje en referencia a las festividades de San José, el administrador Apostólico manifestó: «en los tiempos que estamos viviendo, creo que San José es un santo al cual poder imitar. A veces uno dice que los santos son más admirables que imitables, pero San José es imitable porque es un trabajador, un artesano, un carpintero bien concreto en la realidad de todos los días, de ganarse el pan. El ejemplo que dio a Jesús, que le dio a María también, aceptándola como esposa sabiendo que el hijo de ella era obra del Espíritu Santo y él supo tomarla como su esposa. Es un hombre fiel, justo, que no andaba por las nubes, era muy concreto, como lo es un trabajador: sostener su familia y en todo lo que debe haber aprendido Jesús en ese taller, por eso de allí se le decía a Jesús que era el hijo del carpintero».
Remarcando el mensaje, señaló: «para los tiempos que vivimos y los que somos creyentes es un ejemplo de vida concreta y a la vez con un corazón muy grande de padre».
INSTITUCIÓN
Yendo al plano institucional y en relación a su labor al frente de la diócesis, Giobando explicó: «vengo en un momento muy particular de la diócesis, estoy como administrador Apostólico, tratando de acompañar este tiempo de la diócesis que nos toca transitar como obispo, como pastor y mi deseo es poder colaborar para que la diócesis encuentre, como ha encontrado siempre, el camino pasa servir a Dios, la comunidad de fieles, aunque a veces no entendamos mucho las cosas. A veces es difícil entender todo, pero así al menos saber aceptar cómo estamos y poder seguir adelante en el mejor camino posible para la Iglesia católica en la diócesis».
En relación a su futuro y el interinato, puntualizó: «soy interino y luego verá la Iglesia, el Papa, si me toca acompañar como obispo o preparar el camino para quien venga», cerró.
