Concejal Pilone: “No tenemos seguridad de la calidad de nuestra agua”
El tratamiento del asunto vinculado al archivo de varios expedientes ambientales, abrió un extenso y técnico debate en el Concejo Deliberante. La concejal Graciela Pilone solicitó la palabra y realizó un detallado planteo sobre la situación del agua, el arsénico, el sodio y el uso de herbicidas en Balcarce.
Pilone comenzó explicando que los expedientes enviados al archivo habían sido presentados por su bloque “desde hace dos años”, y que su contenido mantenía plena vigencia a partir de las novedades difundidas este mismo miércoles sobre la clasificación de Balcarce dentro de la zona amarilla por arsénico, junto a otros 66 municipios bonaerenses.
La edil recordó que en 2016 se habían registrado mediciones de arsénico que superaban los valores recomendados —“0,065 frente a los 0,030 y 0,050 mg/l”— y que, aunque hoy la empresa OSEBAL informa estar dentro del rango permitido, la situación sigue siendo preocupante.
Pilone insistió en que la alarma no se dispara por una única medición, sino por la combinación de arsénico y sodio. Mostró estudios realizados por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) entre abril de 2023 y abril de 2025, que indicarían niveles “elevados” de sodio en pozos principales y en establecimientos educativos: “Tenemos 200 mg por litro. Lo dije, lo mostré, y no tuvo despacho”.
Según explicó, la presencia de sodio podría estar vinculada a fertilizantes, herbicidas y ciertos fitosanitarios utilizados en la zona. También agregó que el ITBA había detectado “tendencia al alza en el arsénico” y que los pozos más comprometidos “son los que alimentan jardines de infantes”.
RIESGOS SANITARIOS: CÁNCER, FIBRÓSIS Y ENFERMEDADES CARDÍACAS
Con lenguaje médico, Pilone describió los efectos de la exposición prolongada al arsénico en niveles superiores a los permitidos. Habló de fibrosis pulmonar, cáncer de laringe, cáncer de pulmón, “enfermedades dermatológicas asociadas a la hidroarsenicemia regional endémica” e incluso riesgos cardiovasculares.
Citando al especialista del ITBA, Dr. Alfredo Gallego, Pilone afirmó que los estudios mencionan un incremento de enfermedades cardíacas “del 5 al 10%” para personas expuestas a entre 1 y 5 microgramos de arsénico por litro; “20% en el rango de 5 a 10 microgramos” y “42% en niveles iguales o superiores a 10”.
“Están midiendo mal, no están protegiendo a la población”, afirmó. “No tenemos seguridad de la calidad de nuestra agua”.
También recordó que uno de los expedientes archivados solicitaba una medición más precisa —“menor a 10 microgramos”— en pozos específicos, algo que a su entender “no era caro” y había sido objetado por la Facultad de Ciencias Agrarias del INTA por razones presupuestarias.
Pilone mencionó otro proyecto archivado que buscaba proteger a los productores vitivinícolas locales frente al daño del herbicida 2,4D, cuya deriva afecta a las vides. Recordó reuniones con el Ministerio de Desarrollo Agrario e indicó que “no hay problemas de plagas”, pero sí deriva de agroquímicos que “afectan seriamente al cultivo”.
Reclamó un trabajo conjunto entre INTA, Agrarias, la Dirección Agraria, la Sociedad Rural y productores, y pidió retomar los expedientes porque, según dijo, Balcarce “debe cuidar una industria que crece”.
ORDENANZA DE AGROTÓXICOS: DOS AÑOS DE TRABAJO SIN DESPACHO
La concejal también cuestionó la falta de avance de la Ordenanza de agroquímicos, en la que se trabajó “dos años”, incluso con la participación de especialistas del Ministerio de Desarrollo Agrario. Sostuvo que cada región tiene realidades geológicas y productivas distintas y que por eso “unificar criterios es casi imposible”. Afirmó que las distancias de exclusión que plantean algunas normativas “son ridículas”.
Pilone reconoció que un expediente sí tuvo despacho: el pedido de informes a la Dirección de Fiscalización Vegetal sobre aplicaciones químicas en Balcarce desde enero de 2022.
Finalmente insistió en que el Municipio debería incorporarse a RENAMA, red nacional de municipios que impulsan la agroecología, y pidió a sus compañeros de bloque “retomar estas banderas” en la próxima composición legislativa.
SCIOLI: “NO GENEREMOS PÁNICO, EL AGUA ES SEGURA”
El concejal Gonzalo Scioli respondió que el tema es “sensible”, pero que se debe trabajar sobre datos verificados: “No hay opinión ni partidismo; hay datos concretos”.
Aseguró que Aguas de la Ciudad informa que el agua “es segura y cumple con los parámetros establecidos”, con análisis permanentes y publicados en la web hasta octubre: “Es información pública y transparente”.
Remarcó que todos los pozos que alimentan la red están dentro de los valores permitidos y que están bajo control de la autoridad competente. Por eso pidió “no caer en pánico por una noticia” y transmitir tranquilidad respecto al agua potable.
MARTÍNEZ: “ZONA AMARILLA NO ES ZONA DE RIESGO”
La concejal Florencia Martínez agregó que el arsénico en esta región es “característico del suelo” y que Balcarce —al igual que Mar del Plata— está en zona amarilla, no roja. Recordó que el límite permitido por la OMS es de 10 microgramos por litro.
Aclaró que existen dos tipos de arsénico (As5 y As3), siendo el primero “menos nocivo”, y sostuvo que “no está comprobado” que provoque todas las enfermedades mencionadas. Contó que incluso en Mar del Plata se generó “pánico” y la gente comenzó a comprar agua embotellada por desinformación.
Sobre los agroquímicos, recordó que se trabajó dos años con profesionales y aplicadores, y que la mayoría cumple con las normas, recetas agronómicas y controles. Y remarcó que la Provincia pidió no avanzar con ordenanzas locales hasta completar la georreferenciación anunciada en 2022 para evitar conflictos entre municipios.
GUILLÉN PIDIÓ PRUDENCIA, CONTROLES Y RESPONSABILIDAD DE LOS APLICADORES
El concejal Enrique Guillén coincidió en la necesidad de no generar alarma sin certezas, aunque reconoció que la forma en que se toman algunas muestras podría generar dudas sobre su trazabilidad. Aun así, pidió tomar conciencia de los informes recientes que identifican pozos con niveles altos y avanzar en soluciones como reemplazar temporalmente pozos con problemas.
Sobre los agroquímicos, coincidió con Martínez: si se cumple con la receta agronómica y los controles, “no debería haber daño a la población”. La responsabilidad, sostuvo, recae en los aplicadores que “deben tomar conciencia”.
El concejal Javier Murias sumó que la toma de muestras de OSEBAL se terceriza para evitar cualquier manipulación previa a los análisis. Señaló que esto busca asegurar transparencia y objetividad, independientemente de la empresa concesionaria.
La discusión dejó al descubierto dos posiciones claras: mientras Pilone insistió en riesgos sanitarios, falta de precisión en los análisis y necesidad de avanzar en regulaciones ambientales, el oficialismo respondió apelando a datos oficiales, controles permanentes y la necesidad de evitar alarmas públicas. Aunque los expedientes fueron archivados, el tema quedó instalado y será retomado por la nueva composición del Concejo en 2026.
