Con gritos y caos, Juntos por el Cambio hizo caer la sesión en Diputados
En medio de un escándalo, con la bancada de Juntos por el Cambio enfurecida y a los gritos en contra de la presidencia ejercida por Cecilia Moreau, se levantó la accidentada sesión en la Cámara de Diputados en la que iban a votarse una batería de proyectos.
La sesión, sin embargo, no estuvo caída desde el principio sino que llegó una hora después de su habilitación. Luego de que el oficialismo consiguiera un ajustadísimo quórum de 129 diputados, los integrantes de Juntos por el Cambio bajaron al recinto con la única intención de levantar la sesión, que consideran viciada y "nula" por haber empezado 1 hora y 35 minutos después del horario pautado, muy por encima de la media hora que consuetudinariamente se acepta como margen tolerable de demora.
Apenas bajaron al recinto, y luego de que Moreau anunciara la decisión de votar el temario de inmediato y a mano alzada aplazando las cuestiones de privilegio armaron un "scrum" alrededor del atril de la presidencia, donde se sentó Moreau, y empezaron a vociferar y llamar "violentos" a los oficialistas que les salían al cruce desde el sector derecho del auditorio.
La oposición apelaba a retrasar indefinidamente la sesión con innumerables discursos de protesta durante las cuestiones de privilegio.
Fernando Iglesias, Waldo Wolff, Silvia Lospennato eran algunos de los diputados que iban y venían en ese torbellino de pulsiones desatadas. Karina Banfi y Maximiliano Ferraro eran dos de los más desencajados, haciendo gesticulaciones permanentes y golpeando las bancas con sus palmas con fuerza para hacer oír su descontento.
"Usted a mí no me va a callar Ritondo", se la oyó decir a Cecilia Moreau, a quien Juntos por el Cambio le retaceó el quórum en la sesión preparatoria que tuvo lugar un rato antes para ratificarla como titular del cuerpo. Le recriminaban el haber anulado la resolución que firmaba los cuatro nombramientos de representantes de Diputados al Consejo de la Magistratura en respuesta a un fallo del juez Martín Cormick que impugnó impugnó específicamente la designación de la radical Roxana Reyes por la segunda minoría.
Alegando cuestiones reglamentarias, el oficialismo declaró la continuidad de las autoridades vigentes hasta el 30 de noviembre hasta tanto no se resuelva el conflicto en una próxima sesión preparatoria. Esto profundizó la tensión con Juntos por el Cambio, que le atribuye a Moreau "abuso de autoridad" y atropello institucional.
En ese contexto de discusiones acaloradas que no pudieron zanjarse, se retrasó la sesión especial de la tarde y Juntos por el Cambio la declaró nula por la excesiva demora. (NA)