Cerdos mini pig, una nueva tendencia en adopción de mascotas exóticas
Los cerdos mini pig, una variante porcina, domesticada y de pequeño porte, que ganó impacto mediático de la mano de celebridades de Hollywood, se sumó en los últimos tiempos a la lista de mascotas exóticas que integran los hogares argentinos.
Los mini pig, también conocidos como minicerdos o cerdos tacita de té, salen a pasear con sus dueños, quienes los caracterizan como animales muy inteligentes, cariñosos y demandantes al igual que un niño, según confiaron algunos de sus dueños a Télam.
Julieta Demarco, que vive en el barrio porteño de Saavedra y es asistente en una empresa de informática, tiene dos cerdas de la raza mini pig llamadas Pochi y Cuba, que protagonizan las historias de la cuenta de Instagram @lapochivegana con la finalidad, además, de "concientizar" sobre la importancia de proteger a los animales.
"Yo venía de un bajón emocional y hace casi dos años me regalaron a Pochi, que era diminuta, y me cambió la vida. Los chanchitos son como nosotros, pasé a tener un bebé en brazos de vuelta. Sentí una conexión muy fuerte, fue un amor muy incondicional", contó Demarco.
"Es trabajoso. Son como niños de 3 años, requieren mucha atención, tenés que estar constantemente con ellos. No tienen nada que ver con un perro o un gato, son más parecidos a los humanos. Se aburren y son muy inteligentes", aseguró la mujer, cuyas cerditas conviven en un departamento con su familia, cuatro gatos y un perro.
"Una vez por día las saco a pasear por el Parque Saavedra y los niños le agarran la cola y las orejas y ellas se dejan. Cuando llueve dejo que se embarren, les encanta. El barro las humecta, y cuando hace calor les da fresco y funciona como repelente", explicó Demarco y destacó que "al contrario de lo que se piensa son animales muy limpios, y no tienen olor desagradable".
"Duermen conmigo, vienen conmigo a todos lados, las subo al auto y me acompañan. Son super tranquilas", afirmó Demarco, quien contó que Cuba le llegó a través de una ONG que recupera animales.
La dieta de las cerdas es a base de verduras, proteínas vegetales y frutas, y comen un kilo y medio por día, explicó la mujer y dijo que "aman las frutas dulces, la banana, todo lo que sea calórico, como nosotros. Tienen una locura por la comida, huelen algo y se olvidan del mundo".
Los mini pig viven entre 12 y 15 años y pueden pesar desde 30 a 100 kilos.
En Argentina comenzaron a llegar hace un años por importadores ya que el ingreso al país de estos animales no está prohibido por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), pero quienes lo hacen deben cumplir ciertas pautas.
"Estos cerdos entraron en un momento de una forma que no fue registrada, entonces hace que no se les haya solicitado ningún requisito", explicó a Télam Alejandro Pérez, médico veterinario y encargado del programa de porcinos del Senasa.
"Estos animales son de tipo productivo que se utilizan como compañía, entonces no hay ninguna normativa específica para ese tipo de tenencia. Hay una zona gris, no hay nada para prohibir tenerlos", aseguró. (Télam)