Alcohol Cero: se realizan test bajo la nueva ley
A partir del 1 de enero, comenzó a regir en la provincia, la Ley de Alcohol Cero al volante, que elimina el mínimo permitido de 0,5 de alcohol por litro de sangre a la hora de conducir. A partir de ahora, quien maneje y el test de alcoholemia resultara positivo, enfrentará, dependiendo la graduación alcohólica, severas multas y la inhabilitación para conducir por un determinado periodo de tiempo.
En este sentido y en declaraciones a Radio 100.9, el director de Movilidad y Control Urbano, Lucas Quiñones, dio detalles de cómo se trabaja desde el área con la nueva ley.
“Nosotros realizamos controles de alcoholemia todos los fines de semana, desde antes de la legislación de la nueva ley y por supuesto en estos momentos».
«Desde hace ya una semana que estamos ejerciendo el Alcoholemia Cero, porque se hizo oficial a través del boletín de provincia hace apenas unos días y se ratificó bajo la Ley 15.402. Si bien esto no se hizo desde la sanción de la misma ley en la Cámara, empezamos a llevarlo a cabo a partir de la reglamentación. A partir de ahí empezamos a realizar controles de alcoholemia con tolerancia cero».
«Previo a esto, realizábamos test de alcoholemia y de hecho en el mes de noviembre, tuvimos 30 alcoholemias positivas en total y en diciembre alrededor de 25. En aquel momento, si parábamos a una persona con una graduación de alcohol de 0,3 o 0,4 lo tomábamos como negativo y no se procedió a la retención del vehículo. Ahora este flujo va a aumentar porque todos los test deberán dar 0,0”.
¿Más o menos
conciencia?
Ante la consulta de si se respeta o no, la ley respecto de conducir y el consumo de alcohol, Quiñones, señaló: “en los controles vemos mucho más respeto y cuidado por parte de la gente. En otra oportunidad informamos que durante los bailes de egresados se realizaron controles y ninguna persona dio por encima del permitido, esto se dio porque hicimos campañas de concientización en las escuelas y en bailes de egresados previos. Todos sabían que a la salida, iba a haber control de alcoholemia como todos los años. Fue la primera vez en 5 años que no tuvimos ningún tipo de inconveniente».
«Esto a nosotros nos da una pauta de que se está respetando la medida y la gente está tomando recaudos. El tema son los casos aislados, aquellos incontrolables y totalmente negligentes por parte de quien maneja alcoholizado y con el grado de irresponsabilidad que eso conlleva.
Todos los registros de alcoholemia positiva que tenemos, al otro día tenemos la devolución de que esa persona está inhabilitada para conducir de 6 a 18 meses. Tenemos un listado enorme de personas inhabilitadas en Balcarce. Pero está disminuyendo la gravedad. Ya no pasa todos los fines de semana, sino que son casos aislados”.
La gente toma conciencia con las sanciones, cuando ya está inhabilitada. Los que sí toman conciencia son los vínculos que están alrededor de esa persona. Porque yo sé, que siendo infractor y me sucede un hecho de magnitud, voy a ir a mi casa a hablar con mi familia o se van a enterar de lo que pasó. Entonces, los vínculos que a mí me rodean saben que me retuvieron la licencia, el vehículo, me cobraron una multa de ‘x’ cantidad de dinero, después las reparaciones del vehículo es otra cantidad de dinero.
Entonces son cosas que suman, porque cuando uno lo cuenta, la gente que está alrededor puede tomar conciencia y por otro lado está la gente que sí percibe, que se informa, que mira y tiene conciencia desde el vamos, que no necesita de un control para enterarse que la ley prohíbe la circulación alcoholizado y además de eso, que saben que pueden provocar un perjuicio propio o con terceros”.
Sanciones
En lo que respecta a las sanciones por alcoholemia positiva, Quiñones explicó: “la sanción es mayor, en cuanto a la graduación alcohólica que se tenga. Esto está estipulado en la nueva ley. Esto también es decisión del Juzgado de Faltas, pero la ley lo prevé de todas formas”.
Quiñones definió como una “irresponsabilidad” conducir alcoholizado: “es como ver a una persona con un arma en la calle, es lo mismo. La irresponsabilidad es enorme. Lo que intentamos y le pedimos a la sociedad es que trate de tomar conciencia, porque esto lo planteamos un montón de veces y mucha gente recae en lo mismo.
Nosotros hacemos controles en 2 o 3 calles, pero la ciudad tiene más de 300 y seguramente la medición debe ser mucho más grande, como lo puede ser en Mar del Plata, en Tandil o en Capital Federal. No es que se hace un cerrojo en toda la ciudad y a todos los autos se les realiza el alcoholemia. Es solamente en un sector en un determinado rango horario. Si nosotros extendemos todo eso a toda la ciudad, necesitamos más recurso humano y obviamente el número sería mayor. Ante el control los números son estos. Vemos más responsabilidad, pero también están los casos aislados: hay una realidad, uno cómo controla cuando una persona sale de su casa con alcohol en sangre, no se puede saber. Uno termina enterándose cuando el hecho sucedió y es una lástima que sea así.
Tomar, pero conciencia
En relación a tomar conciencia, Quiñones precisó que durante la Fiesta del Automovilismo habrá un stand en el que se repartirá folletería: “seguramente contemos con la presencia de la ANSV (Agencia Nacional de Seguridad Vial), así que vamos a retomar todo este tema y hablar mucho sobre la Ley de Alcohol Cero, pero es como decimos siempre: el trabajo se hace, pero no se puede remediar al 100% cada situación, porque no se puede controlar a ese 100% de los transeúntes”, cerró.