Un cierre que no fue: la comunidad salvó a Pulgarcito y ahora avanza su recuperación
La histórica guardería municipal, que estuvo al borde del cierre, será refaccionada con el aporte solidario de la Cooperativa de Electricidad. Desde el Sindicato de Trabajadores Municipales destacaron que la intervención fue clave para evitar el desmantelamiento del servicio, y señalaron el compromiso de Laura Troppiani, pieza fundamental en la gestión. El intendente Reino aseguró que “nunca estuvo en los planes cerrarla”, pero reconoció demoras por falta de recursos. El edificio tiene más de 50 años y requiere una reforma estructural.
“SI YO ME HUBIESE QUEDADO CALLADA, HOY PULGARCITO CERRABA”
Con esa frase categórica, la referente del Sindicato de Trabajadores Municipales, Xoana Martínez, sintetizó lo que fue una de las discusiones más tensas de las últimas semanas entre el Ejecutivo municipal y los trabajadores del área de niñez: la situación de la guardería Pulgarcito, que desde hace meses permanece cerrada y cuya reapertura parecía cada vez más lejana.
La decisión de avanzar con obras de refacción por parte de la Cooperativa de Electricidad, en un gesto solidario que sorprendió y fue bien recibido por todos los sectores, destrabó el conflicto y abrió un nuevo escenario. Ahora, el objetivo común es que el espacio recupere su funcionamiento “lo antes posible”, según coincidieron tanto el gremio como el intendente Esteban Reino.
Martínez destacó que “no íbamos a perder a Pulgarcito” y afirmó que el sindicato nunca se desentendió del tema. “Más allá de que nuestro deber sea cuidar el trabajo de nuestros afiliados, también está lo humano. Sabíamos que había chicos que no estaban yendo a la otra guardería porque sus familias no los podían llevar, y eso implicaba que quedaran sin comer”, expresó.
UNA HISTORIA QUE NACIÓ DE LA SOLIDARIDAD
La guardería Pulgarcito ocupa un lugar simbólico en la historia de Balcarce. Fue la primera en su tipo en el ámbito municipal y, aunque su actual sede en el Cerro El Triunfo no es la misma que dio origen al servicio, el espíritu de su creación sigue presente.
“Por lo que nos contaban enfermeros jubilados, originalmente fue un paciente del hospital quien donó una casa para que las compañeras tuvieran dónde dejar a sus hijos. Esa casa estaba en 23 entre 18 y Av. Kelly”, recordó la referente gremial. Según su testimonio, el traslado posterior al cerro no está del todo claro, pero lo que importa hoy es que el servicio no desaparezca. “Pulgarcito es parte de nuestra historia. No podíamos permitir que se cierre”, afirmó.
EL ROL DE LA COOPERATIVA
Una de las claves para destrabar la situación fue la intervención de la Cooperativa de Electricidad General Balcarce. Según relató Martínez, fue la propia Laura Troppiani —esposa del presidente de la entidad y también militante sindical— quien, al conocer la situación, impulsó la propuesta de colaboración.
“Fue una ayuda desinteresada, en favor de algo que es para toda la comunidad”, remarcó Martínez. La cooperativa aportará materiales y mano de obra para una refacción estructural del edificio, que data de hace más de 50 años.
El intendente Reino también valoró el gesto: “La cooperativa se ofreció a repararla como un servicio social en la comunidad. Dijimos que perfecto, ningún problema. Bienvenido sea”.
REINO: “NUNCA ESTUVO EN NUESTROS PLANES CERRARLA”
En diálogo con la prensa, el jefe comunal negó que haya existido una intención real de cerrar Pulgarcito. “Lo que sí tenemos es un edificio absolutamente viejo. Entramos a hacerle algunas modificaciones en enero y febrero, pero al avanzar descubrimos que el deterioro era mucho mayor”, explicó.
Reino justificó las demoras en las obras por la falta de recursos: “Estamos trabajando con personal municipal que también está abocado a otras tareas, como la reparación del bachillerato, el centro de monitoreo, y otras dependencias. No tenemos fondos para contratar empresas externas. Una reparación mínima puede costar entre 10 y 15 millones de pesos solo en mano de obra”.
Consultado sobre la versión del cierre, fue tajante: “No sabemos de dónde salió. Siempre hay que venir a las fuentes. Si algún día tomáramos una decisión así, la comunicaríamos. Pero nunca estuvo en nuestros planes”.
LA OTRA CARA: FAMILIAS SIN ACCESO A LA NUEVA SEDE
Durante el tiempo que Pulgarcito permaneció cerrado, los niños fueron reubicados en la guardería Evita, un edificio moderno que cuenta con capacidad para 30 chicos más. Sin embargo, no todas las familias pudieron hacer uso de esa alternativa.
“Hay chicos que no están yendo porque sus familias no tienen cómo llevarlos. No es que el municipio les niega comida, es que no pueden llegar. Parece que las distancias son cortas, pero cuando hace frío o no hay recursos, se complica”, explicaron desde el STM.
UNA REUNIÓN CLAVE PARA DEFINIR EL FUTURO
Tanto el municipio como la Cooperativa y el gremio coincidieron en que el próximo paso será una reunión para acordar plazos y alcances de las obras. Martínez confirmó que ese encuentro será inminente: “Vamos a ponernos de acuerdo sobre qué implica la ayuda de la Cooperativa y cómo podemos colaborar también desde el sindicato”.
Reino, por su parte, anticipó que la reforma será “estructural e importante” y que el compromiso asumido incluye materiales y mano de obra. “Esperamos que se inicie lo antes posible y se finalice pronto, para poder rehabilitar Pulgarcito en su lugar original”, concluyó.