Príncipe quiere que los pequeños y medianos productores "sean parte del modelo agropecuario"
El presidente de la Federación Agraria Argentina, Omar Príncipe, aseguró en esta ciudad, a la que visitó para participar del festejo del 95º aniversario de la filial local, que "en la actual coyuntura, difícil por cierto, hace falta hacer visible que los pequeños y medianos productores tienen una política pública que nos identifique, nos sostenga y nos promueva, y además ser parte del modelo agropecuario argentino".
El dirigente consideró que las economías regionales siguen en crisis. "Este gobierno no le ha encontrado una solución, profundizándose en algunos casos la brecha entre lo que le pagan al productor y lo que paga el consumidor en góndola. El productor recibe migajas por su producto. Un ejemplo: le pagan el kilo de manzana 2,80 pesos y en góndola llega hasta los 25 pesos el kilo. Hay distorsiones de precios que llegan hasta el 1.900%. En el caso de la leche, hay productores que se están fundiendo y desapareciendo. Hay que mirar esta sangría con atención. Si seguimos así, la producción de alimentos quedará en manos concentradas. Vemos con dolor que hay productores que no están sobreviviendo en esta etapa", afirmó.
Con relación al rol de la Mesa de Enlace, Príncipe sostuvo que es necesario hacer una autocrítica. "Estamos en deuda con los productores. Si bien la responsabilidad de dictar las políticas públicas es del gobierno, nosotros también tenemos que denunciar y presentar propuestas. En este sentido, la FAA es un ejemplo por ejemplo en el manejo del tema de semillas. Este año, el monopolio de Monsanto se adueñó y puso en riesgo la comercialización de granos del país bajo el amparo de tener patentes de un evento tecnológico en soja. Aquí la resistencia fue en conjunto con otras entidades del campo. Propusimos desde la entidad una ley de semillas que está en Diputados, que planifica los próximos diez años, ofreciendo una solución integral poniendo equilibrio en toda la cadena, además de promover la inversión y el desarrollo. En definitiva, que ningún contrato privado esté sobre la ley.
- ¿Observa el futuro con optimismo?
- Se carece de una política pública transversal a los gobiernos y a largo plazo. Fuimos de una banquina a otra y eso también transforma al sector en muy débil, en especial a los pequeños y medianos productores que no pueden absorber los cambios macroeconómicos. En la última época la concentración fue brutal. Vemos ahora una oportunidad y hay que aprovecharla. Pero estamos demandando a este Gobierno que empiece a aparecer esa política a largo plazo para frenar este tobogán donde desaparecen productores y de esa manera entrar en un círculo virtuoso y promover y darle una oportunidad a ellos. Por eso hablamos también del arraigo de la juventud.