Facundo Manes apuesta al valor del conocimiento para crecer como país
El reconocido neurólogo y neurocientífico argentino Facundo Manes se ha dedicado a estudiar el fascinante mundo del cerebro humano y a transmitir esos descubrimientos.
Autor del exitoso libro Usar el cerebro, asegura que para cuidar y utilizar mejor a esta estructura tan compleja es clave conocer cómo funciona.
De eso y otras cuestiones íntimamente relacionadas con el conocimiento expuso Manes a sala llena en el Teatro Municipal por espacio de veinte minutos.
A su término fueron algunos más los minutos que debió dedicar para firmar libros de varios de los asistentes a la charla como también responder a la requisitoria para una foto.
Manes habla rápido, muy rápido, locuaz, con entusiasmo esa pasión genera contagio. Acumula títulos y pergaminos. Pero hace que lo difícil se vuelva fácil, interesante y atractivo.
El Diario transcribe algunas de las explicaciones y reflexiones más destacadas del neurólogo y neurocientífico que tiene en su equipo de trabajo al balcarceño Adolfo García.
¿Cómo funciona el cerebro?
"¿Qué hace un neurólogo recorriendo el país y dedicando parte de su tiempo a explicar cómo funciona el cerebro? Cuando regresé en 2001 a la Argentina, acá no había una tradición de laboratorio, de conocimiento, de investigación de neurociencias cognitivas. La neurociencia es la rama de la ciencia que estudia el sistema nervioso y la neurociencia cognitiva es la rama que estudia los procesos cerebrales: la memoria, la atención, la inteligencia y la emoción, y como ésta influye en la conducta.
"Hay mucho interés en el tema porque todos tenemos cerebro. A todos les interesa saber que es lo que sabe la ciencia y lo que no sabe sobre el funcionamiento de nuestra mente. Nos interesa saber como decidimos, como la emoción juega un rol clave en nuestra conducta, en la creatividad y en la percepción del mundo.
"Nosotros no vemos con los ojos sino con el cerebro. Los ojos transmiten la información a la parte posterior del cerebro y ahí se crea la realidad".
Las enfermedades del cerebro
"Hay mucho interés por saber como funciona el cerebro también porque las enfermedades que lo afectan son la principal causa de discapacidad en el mundo, más que el cáncer y las cardiovasculares.
"Cuando hablamos de enfermedades del cerebro uno piensa en el Parkinson, Alzheimer, esclerosis múltiples y esquizofrenia pero también en un accidente cerebro vascular, autismo, traumatismo de cráneo. Además, uno debe cuidar la adicción porque secuestra al cerebro. A todo esto debemos incluir la ansiedad, el estrés crónico y la depresión.
"La enfermedad cerebral tiene la particularidad que cuando hay un paciente en la casa que la padece, el entorno familiar o quienes lo cuidan se ven afectados. Hay depresión, ansiedad, estrés, insomnio, momentos de psicofármacos y ausencia laboral. El impacto en el grupo familiar y social es muy importante.
"En el caso del Alzheimer, la enfermedad produce muerte neuronal y se destruyen las conexiones que modulan la memoria o algunos aspectos de la conducta. Es progresiva y no tiene cura. Después de los 65 años, hay un aumento exponencial de la misma. El principal factor de riesgo es la edad. Es muy cruel porque perdés la identidad. Y constituye un problema social, económico y político. En Argentina hay medio millón de personas con la enfermedad. Pero cada una tiene un grupo familiar de tres ó cuatro personas por lo que el impacto psicológico es de dos ó tres millones de personas. Los países no saben cómo afrontar esta nueva epidemia.
«Les estoy contando solo una enfermedad. Imagínense si hablamos de ansiedad patológica, depresión. La gente está muy estresada. Por eso digo que la sociedad debería estar interesada en estos temas porque muchos de los avances de las neurociencias son para hacer el bien, para ayudar a los pacientes".
El impacto de las neurociencias
"La sociedad deberá discutir los dilemas morales y éticos que constituyen la base para entender nuestro cerebro, para entender quienes somos. Es importante que la sociedad aprenda del cerebro y de la ciencia del cerebro. Y además como todo lo hacemos con el cerebro, lo que aprendamos impactará en la educación. ¿Qué es la educación? Dos cerebros en contacto: alumno y docente.
"Si aprendemos como aprende un cerebro, tendremos un impacto tremendo en la educación. Y si aprendemos como enseñar, también.
"Quienes imparten justicia, los jueces, deciden con el cerebro. Muchas veces deciden mal porque están cansados y estresados y usan un sistema más automático en la toma de decisiones, no tan racional, lógico y deliberado.
«Las neurociencias van a impactar en todas las ramas de la sociedad. Y es bueno, entonces, que la sociedad aprenda de esto"
La malnutrición, una hipoteca social
"Me preguntan cuáles son las contribuciones que pueden hacer las neurociencias a la sociedad y a las políticas públicas Y yo digo que son muchas. Vivir en la pobreza constituye una hipoteca social. La gente que vive en esa situación no puede pensar más allá de las próximas horas. No tiene la posibilidad de salir, más allá de pensar en la alimentación y en una vivienda digna si no tiene un contexto positivo. Las conductas que genera la pobreza, perpetúan la pobreza. La malnutrición, por ejemplo, impacta en el cerebro. Argentina, produce alimentos para 10 argentinas más, cuando la realidad indica que cada dos chicos, uno tiene algún tipo de malnutrición".
Una nueva adolescencia: los jubilados
"Ya se habla de que hay una nueva adolescencia. En la próxima década habrá muchos que lleguen a los cien años, y llegarán con buen cerebro. Pero si se jubilan a los 65 y no hacen nada, es probable que se depriman. Hasta el último día de la vida hay que hacer lo que a uno le apasiona. Jubilarse viene de jubileo y constituye un premio. Por eso el Estado debe pagarles bien a los jubilados. Insisto, la clase pasiva no va, porque el que no haga nada se deprimirá y eso tendrá un impacto tremendo para el Estado.
Debemos dar oportunidades a los adolescentes de 65 a 100 años.
El impacto en las políticas públicas
"El mayor ejemplo de cómo la ciencia impacta en las políticas públicas es la manera en como trabajamos los científicos. Balcarce tiene un gran científico. Se trata de Adolfo García, que trabaja en nuestro laboratorio. Para hacer un experimento, debemos tener una idea novedosa. Pero además de esa idea nueva, debemos revisar lo anterior. Los científicos trabajamos en equipo.
"La mayor parte del conocimiento se genera con la inteligencia colectiva. Debemos además publicar los datos en revistas internacionales y aceptar las críticas para mejorar nuestro trabajo y el de generaciones futuras.
"Imaginen una sociedad con dirigentes que no inventen cada vez que asumen el poder sino que toman lo bueno que se hizo antes y dejan de lado lo malo, que trabajan con ideas comunes y en equipo, con políticas de Estado que nos unan a todos. Imagínense que hagan el esfuerzo y se expongan a las críticas para así mejorar.
"Pienso que estamos en una situación muy parecida a los fundadores que hicieron la educación pública, los verdaderos patriotas. No pensaron un país para las próximas elecciones sino para las próximas generaciones. En 1896 el país estaba lleno de analfabetos con un 78%. Con educación pública, gratuita e igualitaria en 1947 se redujo al 13%, menos que los que tenían Italia y España.
"Hoy la riqueza de los países está basada en la idea de los ciudadanos, en la educación, en crear trabajos nuevos. Yo tengo dos hijos de 9 y 11 años. Tendrán entre 6 y 7 trabajos en sus vidas y la mayoría de ellos aún no han sido inventados. Hace años no existía Facebook, el celular inteligente, Instagram. El mundo seguirá cambiando. A los hijos de mi país no podemos prepararlos para trabajos no inventados. Pero sí podemos alimentar bien su cerebro con una nutrición adecuada, una vivienda digna y un contexto adecuado de emociones y capital mental para que pueda desarrollar sus potencialidades. Para ello hay que mejorar la educación. Hemos dejado solos a los docentes en el principal trabajo.
"Tendremos un gran país cuando la docencia sea el trabajo más prestigioso. ¿Dónde están todos luchando por la calidad educativa? Solo vemos la discusión salarial, que está bien. Para ello se necesita infraestructura y entidades fuertes.
El cerebro argentino
"El cerebro argentino no es más corrupto que los cerebros de Dinamarca o Suecia. El cerebro es el mismo lo que ocurre que en estos dos países hay castigo social para el corrupto y se aplican las leyes. Acá hay que pensar en el bien común. Argentina tiene dos grietas. También la tienen los países desarrollados, mas allá de las divisiones lógicas que existan, pero debemos lograr tener políticas de Estado que unen a todos. Esa política debe ser el conocimiento que es más que educación. Significa cuidar el cerebro, significa educación e instituciones de calidad. Lo vamos a lograr. La democracia en el '83 nos unió. Hoy necesitamos un paradigna y un clima similar que es el conocimiento. Ustedes deben presionar para lograrlo. La democracia se logró porque la sociedad la pidió y la cuida. Lograremos también este paradigma del conocimiento si la sociedad lo pide. Debemos ser embajadores del conocimiento y luchar por el país que soñamos. Como lo hicieron los patriotas de la educación pública.
"Soy optimista. Ahora nos toca tener un paradigma nuevo que nos saque de la coyuntura. Jorge Luis Borges le dijo a Raúl Alfonsín, antes de asumir la Presidencia: "los argentinos no solo tenemos el derecho sino el deber de la esperanza".