San Lorenzo obtuvo su primer triunfo de la temporada
"Los goles que no se convierten en un arco, se sufren en el otro"… Más o menos así dice un refrán futbolero, que bien puede servir de referencia a la síntesis de lo acontecido el sábado en cancha de Boca Juniors, donde Atlético San Agustín dispuso de gran cantidad de posibilidades para marcar pero fue San Lorenzo quien convirtió, para de esta manera llevarse su primer triunfo de la temporada.
Bajo el arbitraje de Lucas Berardi tuvieron desarrollo las acciones, en cotejo correspondiente a la decimoquinta jornada del certamen liguista, en un campo de juego resbaloso, producto de la lluvia de los días anteriores y que ya había sido "pisado" por las divisionales Séptima y Cuarta, antes del encuentro de la categoría mayor.
MUCHAS LLEGADAS
Lo más jugoso ocurrió en el primer tiempo, con los sanagustinenses como protagonistas, hilvanando una serie de acciones ofensivas que no pudieron concretar. A veces por la mala puntería, mayormente por la destacada actuación del arquero Lucas Miño, baluarte fundamental para el éxito de su equipo.
Así, a lo largo del período inicial los de la vecina localidad tuvieron a su alcance la posibilidad de convertir en varias ocasiones. La primera fue a los 12 minutos y la última a los 41', intentando con diferentes variantes, mientras que su oponente apostó a resguardarse cerca de su valla e intentar con salidas directas.
En materia de jugadas de ataque, se registró un remate cruzado de García que pasó frente al arco, otra combinada en la que definió "Maxi" Charmelo para la primera tapada del arquero. También una doble chance con remate de Franco Vega en el palo y luego Miño conteniendo sobre la línea el disparo de Juan Goyeneche, que se había hecho del rebote.
Por vía aérea un cabezazo de Simón Negreira apenas sobre el travesaño y otro del mismo futbolista junto a un palo, tras sendos córners. Y para cerrar, una jugada donde el arquero de San Lorenzo se lució en forma consecutiva, al taparle un cabezazo alto a William Gasparola y otro a Vega en el rebote, de frente a su posición.
Mientras tanto San Lorenzo se agazapaba e ideaba alguna salida rápida, intuyendo que se podía presentar alguna ocasión y había que estar preparado. Y así se dio a los 38 minutos, cuando Mauro Baldis escapó por izquierda, eliminó en el duelo personal a Negreira, se acomodó y sacó un derechazo a media altura que se metió en el segundo palo de Fernández.
MENOS INTENSO
El complemento fue distinto, con la ventaja del gol San Lorenzo estuvo tranquilo, sus defensores y en especial los centrales (fundamentalmente )devolvieron todo lo que cayó cerca de su posición, en tanto que en ofensiva crecieron las labores de Mauricio Maureira aguantando y jugando con criterio junto a "Chamico" Lleuful, uno de los puntos altos en materia de retener la pelota y habilitar a sus compañeros a partir de su accionar, mayormente por sector izquierdo y de tres cuartos de cancha en adelante.
Por su parte San Agustín, con la obligación de ir en busca del empate, no consiguió las vías para hacerlo y no fue el mismo del primer tiempo. Con el correr de los minutos se realizaron modificaciones en ambos equipos, buscando variantes ofensivas por un lado y recambio de aire y refuerzo de marca en el otro.
Las jugadas más destacadas tuvieron lugar en los últimos diez minutos, incluido el tiempo de adición, marco en el cual también se fue expulsado el entrenador sanlorencista Omar Gutiérrez, por protestar un fallo del árbitro. Un remate de Giménez cruzado pero sin dirección y dos incursiones de Bottiglieri, ambas despejadas por Miño,en favor de San Agustín; una réplica de San Lorenzo a través de Lleuful, que se la picó al arquero pero este contuvo.
SUS REALIDADES
San Lorenzo ganó así por primera vez en 2024, ya había conseguido una igualdad la semana pasada ante San Manuel y ahora mira las cosas con otra perspectiva, especialmente desde el factor anímico. Y San Agustín parecía tras el triunfo ante Boca que podía recuperarse de varias derrotas consecutivas, pero no lo consiguió.