La segunda final del Play Off, que tuvo enfrentándose en cancha a Atlético San Agustín y Deportivo Los Pinos, por una circunstancia que motivó el traslado de una jugadora al Hospital quedó sin culminar y su resultado que se determina con los minutos faltantes, lo definiría hoy el Tribunal de Disciplina.

TIEMPO JUGADO

En un estadio municipal con buen marco de público, sumado al colorido que le provocaron ambos hinchadas al momento del ingreso de los equipos al terreno de juego, se desarrolló este cotejo arbitrado por Yésica Guevara.

De entrada probó Deportivo Los Pinos con la gran pegada de Julieta Bibbó, pero su remate fue bien contenido por Lucía D´Agata. Fue de lo poco que en ofensiva realizaría dicho elenco, ya que sus gestoras de juego y las delanteras estuvieron bien contenidas por mediocampistas y defensoras rivales, respectivamente.

Atlético San Agustín, en cambio, a pesar de contar con la ventaja de dos goles conseguida en la primera final, optó por ir en busca de la apertura del marcador. En un lapso de cinco minutos se acercó con un tiro libre de Anaclara Pietrantuono que Brisa Divito mandó al córner, luego con una media vuelta de Camila Contreras que nuevamente la arquera despejó al tiro de esquina, tras lo cual desbarató otra actividad con destino de gol al taparle el mano a mano a Daiana Godoy.

Tanto ir dio sus frutos a los 17’, cuando Anaclara Pietrantuono se internó en el área contraria, eludió un par de defensoras y sacó un zurdazo bajo, que se coló en el primer palo para desatar un alocado festejo, tanto dentro de la cancha como en las tribunas.

Con la amplitud de diferencia en el global, las sanagustinenses siguieron con su tónica de hilvanar ataques, siempre atentas a lo que Los Pinos pudiese hacer con alguna salida rápida. Precisamente en una de ellas escapó en velocidad Marilina Fischetto, enganchó hacia el medio y desairó a su marcadora para rematar bajo pero débil y desviado.

No transcurrió demasiado tiempo y Godoy tuvo en sus pies la posibilidad del segundo gol, pero nuevamente Divito se lució al contener su lanzamiento.

El trámite era entretenido, había acción y ambas disputaban el juego con sus armas, intentando hacer lo mejor posible en beneficio de su equipo. Inclusive algunas acciones bruscas merecieron algunas tarjetas amarillas, pero hasta ahí lo normal de un choque de estas características. Hasta que llegó el minuto 35, cuando Bibbó ejecutó un tiro libre y la envió alta, motivando la disputa aérea entre Paola Pueblas (que finalmente cabeceó apenas desviado) y Ana Méndez, que chocaron en su intento de impactar la pelota y quedaron tendidas en el piso.

Pasaron unos minutos y la defensora de San Agustín pudo recomponerse, no así la delantera de Los Pinos, lo cual motivó el llamado a la ambulancia y la posterior llegada de dicha unidad, que trasladó a la goleadora al centro asistencial.

Inicialmente había perdido la sensibilidad en sus piernas, luego en el nosocomio se le realizó una tomografía que constató que había sufrido traumatismo de cráneo con un pequeño corte y quedó en situación estable, determinando el médico que la atendió que quedara internada en observación.

EN LA CANCHA

Luego del retiro del vehículo sanitario, la jueza Guevara indicó a las capitanas que los cinco minutos que restaban del primer tiempo se incluirían en el complemento, tras lo cual los equipos se dirigieron a los vestuarios.

Luego de unos minutos las portadoras del brazalete y los entrenadores fueron convocados al recinto arbitral. Allí Marilina Fischetto dio a conocer la postura de Deportivo Los Pinos de no disputar el segundo tiempo, debido a la situación anímica producto de lo ocurrido con Pueblas, además de bregar por la presencia en las canchas de una ambulancia o personal médico para este tipo de casos, instando a todos los presentes en esta mini reunión a acompañar esta iniciativa, lo cual fue correspondido.

Salieron del vestuario arbitral y minutos después las jugadoras de Atlético San Agustín iniciaron los festejos, entendiendo que el partido había culminado y que por el retiro de su rival, quedaba el marcador como estaba y por ende se aseguraba el título.

No faltó la tradicional vuelta olímpica y la Policía abrió las puertas laterales para al ingreso del público, que pudo festejar por un largo rato dentro de la cancha con las jugadoras de su equipo, pero sin la entrega de la copa “Toto Guerra - Mandinga Moyano”.