"Plástico Cero": una jornada de concientización y limpieza en el cerro El Triunfo
En el Día Mundial del Ambiente, estudiantes del turno tarde de la Escuela de Educación Especial N° 502 Mario C. Vitalone realizaron una intervención en el principal parque de la ciudad para visibilizar el problema de la contaminación por plásticos, promover hábitos sustentables y reflexionar sobre la importancia de reducir el uso de materiales descartables en la vida cotidiana.
EL COMPROMISO EMPIEZA POR CASA
Cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Ambiente, y este 2025 la consigna es clara: "Poner fin a la contaminación por plásticos". A nivel mundial, la producción de plásticos supera los 430 millones de toneladas anuales, de las cuales una porción considerable termina su ciclo tras un solo uso. Frente a esta problemática, los estudiantes de Formación Técnica de la Escuela de Educación Especial N° 502 Mario C. Vitalone tomaron la iniciativa con una propuesta concreta y educativa.
El pasado jueves alumnos del turno tarde llevaron adelante la campaña "Plástico Cero" en el cerro El Triunfo. La jornada consistió en una limpieza del espacio verde para retirar plásticos descartados, promover el compromiso ciudadano y compartir alternativas sostenibles que ayuden a reducir el consumo diario de este material.
UN MENSAJE CLARO Y ACCIONES CONCRETAS
Los jóvenes no solo realizaron tareas de recolección, sino que también dialogaron con los vecinos para concientizar sobre el impacto ambiental del uso indiscriminado del plástico. Entre las alternativas difundidas durante la jornada se mencionaron las bolsas de tela reutilizables, las botellas de acero inoxidable, los cubiertos de metal y los sorbetes reutilizables.
Desde la institución educativa destacaron que esta fecha es una oportunidad para reflexionar y actuar: "Las pequeñas decisiones tienen un impacto real", afirmaron. Bajo ese espíritu, la actividad buscó instalar una pregunta urgente: ¿Planeta o plástico?
HERRAMIENTAS LOCALES PARA UN CAMBIO GLOBAL
En Balcarce existen programas municipales que ayudan a canalizar correctamente los residuos. Los plásticos de un solo uso pueden depositarse en las llamadas Botellas de Amor, que luego son recicladas, mientras que los plásticos reciclables tienen su espacio en el programa Miércoles Verde. La clave, coinciden educadores y alumnos, está en asumir compromisos sostenibles en la vida cotidiana.
Como señalan los impulsores de la campaña: el mejor residuo es el que no se genera. Y esa es una premisa que vale tanto en las aulas como en los hogares y en cada rincón del espacio público.