La demanda de bolsones del SAE no para de aumentar

La demanda de bolsones del SAE no para de aumentar

Los números hablan por sí solos. La extensión de la cuarentena a causa del Coronavirus demuestra el impacto que tiene la crisis económica en la comunidad.

Desde abril, y en forma progresiva, mes a mes, ha ido en constante incremento la demanda de los bolsones de alimentos correspondiente al Servicio Alimentario Escolar (SAE), programa que depende de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires y que en Balcarce instrumenta el Consejo Escolar.

Como es de público conocimiento a partir de la declaración de la cuarentena por el Covid-19, los comedores escolares dejaron de funcionar por lo que dicha necesidad trata de cubrirse con los bolsones de alimentos.

ENTREGAS MENSUALES

Dos veces al mes se brinda la ayuda alimentaria en distintos establecimientos educativos del distrito a los progenitores o personas adultas responsables de los beneficiarios del SAE, en horarios convenidos previamente y en grupos reducidos para evitar la aglomeración de personas.

Desde el miércoles y hasta hoy se desarrolla la segunda entrega del mes, tal cual está estipulado. En esta oportunidad se están entregando algo más de 3.800 bolsos con alimentos que buscan cubrir necesidades nutricionales básicas, de acuerdo a lo exigido por las autoridades educativas provinciales.

El valor fijado de cada bolsón, explicó el presidente del Consejo Escolar, Cristian Coria, registró un aumento: de 750 pesos pasó a 832,20.

Admitió Coria que Balcarce ya superó el cupo que tiene disponible, que es de 3.592 bolsones por cada una de las dos entregas mensuales. «Podemos afrontar esa mayor demanda, que nunca descendió, a partir de que en entregas anteriores no se llegó a ese número y fue quedando un remanente. Por suerte estamos bien y podemos dar respuesta a las necesidades», añadió.

Como ya informara El Diario, los directivos de cada establecimiento educativo son los responsables de llevar a cabo el relevamiento de acuerdo a las necesidades de la matrícula y luego elevar el correspondiente informe a los miembros del Consejo Escolar para disponer las compras de alimentos, teniendo en cuenta precio y calidad de los productos y así armar los bolsones conformados al menos por una docena de artículos.

DEMANDA CRECIENTE

Cuando en el mes de abril empezó esta modalidad al dejar de funcionar en forma momentánea los comedores escolares, se armaron cerca de mil bolsones para atender la demanda existente.

Con el paso de las semanas, la prolongación de la cuarentena y sus efectos en la actividad económica, el número fue elevándose llegando en septiembre a superar los 3.800 bolsones, superando los 7.000 en este mes.

PROTOCOLO

«Las directivas de trabajo son, como siempre, emanadas del Ministerio de Desarrollo, obedeciendo el protocolo vigente para poder llevar a cabo esta labor insustituible como lo es la provisión de alimentos a quienes lo necesitan», se informó desde el Consejo Escolar destacando y agradeciendo además la labor que desarrollan auxiliares de tercera, docentes, directivos, inspectores y la Municipalidad, en este último caso aportando la logística y a todos los que con buena voluntad y predisposición colaboran y hacen factible esta labor.