Incertidumbre de cara al inicio del ciclo lectivo
Hoy comienzan las clases, o deberían comenzar las clases.
Como viene ocurriendo desde hace ya tiempo, el inicio del ciclo lectivo está inmerso en una gran incertidumbre.
Los gremios que integran el Frente de Unidad Docente, en paralelo con la convocatoria de la huelga nacional llevada a cabo por la CTERA anunciaron la semana pasada la decisión de parar desde hoy por 72 horas, al rechazar la propuesta salarial presentada por el Gobierno Provincial en la última reunión Paritaria "porque achata la escala salarial y no contempla la pérdida de poder adquisitivo de 2018".
Por su lado el director general de Cultura y Educación bonaerense, aseguraba continuar con el diálogo para llegar a un acuerdo entre las partes y solicitaba "que las escuelas y los comedores estén abiertos el 6 de marzo".
Gabriel Sánchez Zinny remarcó tras el anuncio del paro, que la posición que tomará será "continuar con el diálogo pero descontando los días de no trabajo".
En medio de este escenario entra a jugar la postura de cada docente.
Y en esto hay una gran disparidad de actitudes.
En Balcarce en particular, según se pudo conocer hay un importante número de educadores que está dispuesto a no plegarse al paro. El temor a los descuentos, que anticipó realizará el Gobierno, es uno de los motivos que los lleva a tomar esta postura, pero también juega un rol importante el no estar de acuerdo con lo que determinaron las cúpulas gremiales..
Lo concreto es que son muchos los docentes que dando la espalda a la decisión gremial irán a sus respectivas escuelas, mientras otros apoyarán el paro como modo de presionar por los reclamos solicitados.
Surgirán luego, como ya es tradicional, las diferencias en cuanto al porcentaje de acatamiento a la medida. Los números "muy bajos" desde Educación hablarán del fracaso del mismo, mientras el "altísimo porcentaje" de adhesión del que darán cuenta los gremios tratará de mostrar el "triunfo" sindical.
La realidad es que, más allá de los números, el inicio del ciclo lectivo transita en medio de aguas agitadas y que la tormenta amenaza con continuar.
Imaginando a la educación como un inmenso barco en medio del temporal, uno podría ver a los integrantes del Gobierno en un bote con los chalecos salvavidas puestos y todos los elementos como para capear la tormenta y en otro bote están los popes gremiales en similares condiciones; mientras los alumnos, simples pasajeros de la nave que promete llevarlos al paraíso de la sabiduría, desesperados, escuchan que todos hablan de ellos mientras ven como de a poco, sin salvavidas a mano, se van ahogando en el mar de la ignorancia.
No importa… el año que viene habrá nuevos pasajeros, nuevas ofertas y un nuevo temporal. La historia, lamentable e inevitablemente de seguir así volverá a repetirse…