Fue homenajeado Lucas Kraglievich
Al cumplirse el pasado sábado un nuevo aniversario de su nacimiento, se realizó un tributo a la figura de Lucas Kraglievich junto al busto que lo recuerda, el cual está ubicado en la intersección de las calles 18 y avenida René Favaloro.
El acto, organizado por la Subsecretaría de Cultura y Educación y el Club Rotario Balcarce, contó con la presencia de un numeroso grupo de familiares de Kraglievich, miembros de la entidad rotaria, funcionarios municipales, integrantes del oficialismo del Concejo Deliberante y vecinos.
En el inicio del mismo hizo uso de la palabra el titular de Cultura, César Gustavo De Gerónimo. Posteriormente hizo lo propio Gladys Córdoba de Ruzza, impulsora del permanente homenaje al paleontólogo balcarceño.
Tras hacer un repaso sobre momentos trascendentes de la vida de Kraglievich, la oradora resaltó su anhelo de que en algún momento Balcarce cuente con un museo de Ciencias Naturales y que éste lleve el nombre de Lucas Kraglievich.
En el final se procedió a colocar una ofrenda floral al pie de busto que lo recuerda.
BREVE RESEÑA HISTÓRICA
Lucas Kraglievich (nació el 3 de agosto de 1886 en balcarce y murió el 13 de marzo de 1932 en Buenos Aires) fue un paleontólogo dedicado al estudio de mamíferos fósiles. Estudió ingeniería en la Universidad de Buenos Aires aunque abandonó la carrera cuando estaba a punto de terminarla. Fue la paleontología su vocación y fue fiel a ella hasta su último día.
Fue contemporáneo de Ameghino y miembro del Museo de Historia Natural de Buenos Aires, que terminó dirigiendo en 1921. También presidió la Sociedad Argentina de Ciencias Naturales durante dos períodos consecutivos.
Entre sus investigaciones más destacadas se encuentra el descubrimiento de 28 nuevas familias y subfamilias, más de 80 géneros y subgéneros y 250 especies y subespecies, por lo que publicó en las más destacadas revistas de su especialidad. La Academia Nacional de Ciencias le otorgó en 1927 el Premio «Ladislao E. Holmberg».
Fue objeto de persecuciones políticas por la dictadura de José Félix Uriburu razón por la cual se radicó en Montevideo, Uruguay, el 11 de enero de 1931, sus descubrimientos en este país que lo acogió fueron numerosos y se encuentran en el Museo de Historia Natural de Montevideo. Su último trabajo escrito fue el Manual de Paleontología Rioplatense el cual logró terminar a pesar de la parálisis ocasionada por su enfermedad y gracias a la ayuda de su esposa Francisca y al director del Museo de Historia Natural de Montevideo de ese entonces, Garibaldi J. Devincenzi. Falleció en Buenos Aires y sus restos fueron velados en la Sociedad Científica Argentina y sepultado en el panteón de dicha sociedad en el cementerio de la Recoleta.