En un tono severo, el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) difundió un comunicado en sus redes sociales, que también hizo llegar a El Diario, en el que denuncia lo que considera “un gravísimo posible delito en el Hospital”. El texto comienza con una pregunta que atraviesa toda la acusación: “¿El quiosco de rayos del hospital: malversación de fondos públicos y presunta connivencia de la jefa de área y silencio cómplice?”

La historia que da origen a la denuncia gremial se remonta al 27 de diciembre de 2023. “Un día normal de trabajo. Como cualquier otro, cuando el 27 de diciembre de 2023 una trabajadora, que estuvo como monotributista 3 años cubriendo fines de semana y feriados en Rayos del Hospital, se dio cuenta que le estaban pagando las horas de trabajo menos que otra compañera, momento en el cual conversa con su compañera y se entera que de favor la otra la cubría guardias como practicante sin ART ni nada fines de semana y feriados y que entre algunas de sus compañeras, trabajadoras municipales, se pasaban horas extras, hacían una vaquita y le pagaban.”

El Sindicato relata que la situación se agravó cuando la trabajadora, al plantear el caso a su jefa, la doctora Homar, terminó perdiendo su puesto: “Esta trabajadora enojada va a hablar con su jefa, la doctora Homar y le plantea la situación: el resultado es que la dejan sin trabajo a ella y a la practicante, con un futuro laboral por delante.”

Según el comunicado, la trabajadora también llevó su reclamo ante el director del Hospital, el doctor Gabriel Angelini, lo formalizó por escrito y logró que se abriera un sumario administrativo. Sin embargo, denuncia que las promesas de contratación no se cumplieron: “Va a ver al director del Hospital, doctor Gabriel Angelini, le plantea la situación, hace una denuncia por nota formal, se abre un sumario administrativo, que hay trámites en Asesoría Legal y le prometen que por la valentía de denunciar el hecho la iban a contratar, promesa que nunca se cumplió y siguieron entrando trabajadores que serían afines a la jefa, hoy de vacaciones.”

En el tramo más crítico del texto, el STM lanza una lista de preguntas que apunta a la conducción del Hospital y al rol de las autoridades políticas: “Y nosotros nos preguntamos: ¿Es tan grande el amiguismo en el Hospital?. ¿La jefa permitió y firmó tantas horas extras sabiendo lo que pasaba, consintiendo esto?. ¿El director Angelini sigue teniendo una jefa en estas condiciones y con sumario?. ¿No están malversando fondos públicos?. ¿Personal no controla nada?. ¿Para qué sirve denunciar si te van a dejar sin trabajo?. Un trabajador subcontrata a un monotributista. Pero luego el Municipio reconoce que la joven trabajó y le paga el dinero”.

En esa línea, el Sindicato insiste en que los hechos podrían configurar una figura delictiva: “A las claras estaríamos ante la presencia de un delito. De la cual claramente, al margen de la etapa administrativa, vamos a iniciar las acciones que creamos oportunas.”

El documento, cargado de indignación, finaliza con interrogantes que aluden a un funcionamiento irregular del servicio de Rayos y a una supuesta protección política hacia la jefa denunciada: “¿Es un hospital o es un quiosco? ¿Donde el que denuncia al final es la víctima de un sistema perverso? ¿Será verdad que esta jefa ya habría tenido múltiples problemas, inclusive denuncias de violencia de trabajadores y todo quedó en la nada? ¿Será verdad que reina el miedo y el dolor?”

Finalmente, el STM vuelve a señalar la falta de respuestas institucionales y la persistencia de la situación, que según afirman, se mantiene pese al paso del tiempo: “Mientras tanto una persona, hoy de vacaciones, sigue manejando un servicio con la complicidad del poder político de turno. Se adjunta denuncia presentada por la compañera monotributista al director Angelini. Hoy sin respuestas, sin trabajo y con un sumario que lleva dos años. La Justicia lenta no es Justicia.”