El Juez Ricardo Crotto piensa como sera su vida luego de su jubilación: «Quiero disfrutar de esta nueva etapa»
Después de 30 años de servicio en el Poder Judicial, el juez de Paz Letrado del distrito de Balcarce Ricardo Crotto presentó formalmente, al solo efecto de obtener el beneficio jubilatorio, la renuncia a su cargo. El 1 de diciembre es el día de su renuncia, «a partir de allí comienza una nueva etapa en mi vida y quiero disfrutarla», manifestó a El Diario. Durante la entrevista, Crotto relató cómo fueron sus inicios como abogado y que lo llevó a iniciar su carrera, reflexionó sobre los cambios en el sistema judicial a lo largo de todos estos años y reveló que planes tiene luego de su jubilación.
Ricardo fue el primer profesional del derecho en su familia, sus padres, «Tota» y Huber, trabajaron toda su vida como comerciantes, codo a codo. Cursó el nivel secundario en la EESM Nro 3 «Carmelo Sánchez», allí comenzó a nacer su afición por las materias de humanidades, aquel camino lo llevaría a decidir por su carrera de abogado. «Tuve la suerte de tener dos profesores maravillosos como Carlos Segura en Historia y Olga Chanaguir de Togni en Instrucción Cívica, una persona extraordinaria que educó varias generaciones de balcarceños». Ricardo contó que cuando terminó el secundario nació una necesidad de revelarse contra todas las injusticias, un sentimiento propio de un chico de 17 años. «Me fui a estudiar la carrera de Derecho a La Plata y rendí el examen de ingreso, de 1.300 postulantes entre los cuales el único de Balcarce era yo, entramos alrededor de 230. Hace unos días casualmente se cumplieron 40 años de mi egreso de la Universidad de La Plata con el título de abogado».
VOCACIÓN Y PROFESIÓN
«La vocación es lo que uno manifiesta a esa edad, pero cuando uno se hace grande te vas dando cuenta que es muy difícil decidir a los 17, 18 años qué vas a hacer el resto de tu vida. Por eso muchos chicos hoy se permiten, y esta muy bien que así sea, cambiar de carrera y buscar algo que te haga feliz durante toda tu vida. Cuando yo estudiaba era un idealista, querés ayudar a combatir las injusticias en el mundo, pero después cuando salís es bravo. Considero que para todas las profesiones tendría que haber residencias como pasa en la carrera de medicina, para formarte y no salir tan crudo a la calle. Te vas dando cuenta de lo que te gusta a medida que vas desarrollando la actividad», remarcó.
«El apoyo de mis seres queridos ha sido importante, uno siempre se lleva los temas del Juzgado a la casa, es natural que así sea. Cuando ejercés un cargo a conciencia tenés que estar todo el día abocado, si te llaman por teléfono un fin de semana a la madrugada tenés que estar». El juez aprovechó la oportunidad para agradecer el apoyo de todo el personal del Juzgado durante tantos años. «Quiero destacar el trabajo y el acompañamiento de todo el personal del Juzgado. Hemos logrado una armonía muy linda, se han incorporado chicos muy jóvenes, la mayoría de los que estamos hoy han sido incorporados durante mi gestión y sin su acompañamiento no hay tarea que ningún juez pueda desarrollar», enfatizó. «Hay una calidad humana importante y mucho compromiso con el trabajo», agregó.
«Gracias a Dios elegí bien mi profesión, me gusta mucho el derecho y admito que siempre disfruté más estar de este lado del mostrador que litigando. Ejercí la profesión liberal unos años y en 1994 ingresé al Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires siendo el primer secretario letrado que tuvo el Juzgado. En el año 2008, luego de haber concursado en 2007 y pasado todo el proceso legal de selección de jueces, tuve el honor de ser designado Juez de Paz Letrado de Balcarce; y aquí estamos, próximos a cerrar una etapa».
LA EVOLUCIÓN DE LA JUSTICIA DE PAZ LETRADA
A días de su retiro, el magistrado habló sobre los cambios que sufrió el Poder Judicial en estos últimos 30 años, además de la evolución del rol del juez de paz. «Antes el juez de paz era un vecino distinguido, que tenía algún conocimiento de derecho y sobre todo se lo elegía por sus condiciones morales. En 1979 se crea la justicia de paz letrada, el cargo lo ocupa un abogado y a partir de allí asignan competencias», explicó el juez.
«En los 30 años de servicio en el poder judicial han habido cambios sustanciales, la Justicia de Paz Letrada, sobre todo la del interior de la Provincia, ha absorbido una gran cantidad de competencias por disposiciones legales, teniendo más competencias que las que tiene un Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial de Mar del Plata. Porque tenemos temas de familia, correccionales, violencia familiar, y más competencias que se fueron sumando, lo cual complejizó la tarea. La sociedad cambió mucho, hay muchos más abogados, además del crecimiento exponencial de las causas en el Juzgado. Hace 30 años no era lo mismo que ahora, cuando yo empecé éramos siete personas en el Juzgado, hoy somos 19 y no damos abasto. Se complejizó todo, el país ha cambiado mucho en detrimento de valores, las crisis socioeconómicas recurrentes que hemos vivido van deteriorando el sentido de familia, del respeto por el otro, es complicado el panorama».
«De todas las causas que crecen de manera exponencial la que más preocupa son las de violencia familiar. Lamentablemente existió siempre, solo que antes había tabúes y ciertos valores disociados, hay que ser benévolo y mirar la sociedad como era hace 40 o 50 años y cómo es ahora. La gente se anima más a denunciar, hay una tendencia notable a hacer ver el conflicto y eso es bueno. En toda cuestión de violencia familiar, las principales víctimas son los niños, los hijos de un matrimonio que está pasando por malos momentos».
LA MÚSICA Y EL FÚTBOL, SUS GRANDES PASIONES
Para Ricardo se trata de una nueva vida, con sentimientos encontrados porque algo se termina pero con ganas de disfrutar lo que viene. Se describe como una persona inquieta, con cosas pendientes por hacer, como por ejemplo dedicarle más tiempo a la música. «La música es mi cable a tierra, el arte es lindo en cualquiera de sus formas y te permite distenderte. Este trabajo tiene su carga de estrés, como cualquier trabajo, y la música ayuda», explicó.
«Desde los 12 años intento tocar la batería y lo he hecho por muchos años, creo que ahora es un buen momento para hacerlo de forma más relajada. Desde que tengo uso de razón en mi casa se escuchó siempre música, tengo hermanos mayores que siempre traían discos a casa y tuve la suerte de, ya a los 8 años, conocer bandas como Los Beatles o Creedence y a partir de ahí me empecé a interesar por las bandas que se escuchaban en aquel momento».
«De chico mis viejos me habían comprado una guitarra porque no había batería en Balcarce, pero me las arreglé, daba vuelta la guitarra y empezaba a golpear contra la caja, lo jodí tanto a mi viejo que a los 12 años me compró mi primer batería y no paré más. Una vez que empecé a estudiar ya no tocaba con tanta frecuencia pero siempre me hacia un lugar en mis ratos libres. Tuve la suerte de hacer música, bueno no tanta porque los vecinos tenían que soportar los ruidos, acompañado de amigos que compartían el mismo amor por la música. Tuve varias bandas, la más conocida en la ciudad fue Días de Vida, con Ricardo Siffredi y Cesar Vismara, que durante muchos años estuvimos tocando por todos los pubs, bailables, tanto acá como en Mar del Plata. De grande estoy despuntando el vicio con amigos que siempre me invitan a tocar».
Otra de las grandes pasiones de Ricardo es el fútbol, antes de nacer ya lo unía un lazo con el Club Atlético Independiente, con la suerte de presenciar las grandes hazañas lideradas por Bochini, Bertoni y compañía, lazo que se volvió inquebrantable con el paso del tiempo. «Soy un enamorado del fútbol, desde que nací soy hincha de Independiente, al igual que mi viejo y toda mi familia. Es una pasión, nadie lo refleja mejor que Eduardo Sacheri en «El secreto de sus ojos», vos podes cambiar de todo menos de pasión. El deporte siempre me gustó, practiqué algunos pero nunca fui bueno en ninguno», dijo con una sonrisa, «hoy tengo el orgullo de que mi hija Juana sea una apasionada del fútbol y esté jugando profesionalmente». Juana Crotto tuvo la fortuna de obtener el Campeonato Femenino de Primera División con Boca Juniors en 2022 y hoy defiende los colores de Vélez Sarsfield. «Mi vida siempre estuvo vinculada al fútbol de alguna u otra manera, mi sueño sería verla con los colores de Independiente», añadió.
Por último, Ricardo se tomó un párrafo aparte para agradecer a este medio. «Quiero darle las gracias al director de El Diario y a todo su personal, por la objetividad con la que se desenvuelven y por haber sido absolutamente discretos. Informar objetivamente tiene un plus, y más en una época en donde se maneja tanto sensacionalismo», concluyó.