Clases públicas de Ciencias Agrarias contra el recorte presupuestario y por una suba salarial
La rotonda central de la plaza Libertad se convirtió en la mañana de ayer en un aula al aire libre. Allí, profesores de las cátedras de Bioquímica, Economía de la Producción e Inglés de la Facultad de Ciencias Agrarias dependiente de la Universidad Nacional de Mar del Plata dictaron sus clases como parte de una acción que se replicó en múltiples puntos del territorio nacional en rechazo al recorte presupuestario en ese nivel de enseñanza y por un aumento en los salarios.
La propia Facultad decidió levantar la voz ante la problemática existente llevando adelante esta acción que encontró eco en profesores, alumnos y personal no docente, entre otros.
La preocupación del vicedecano
El vicedecano de la casa de altos estudios, ingeniero agrónomo Miguel Pereyra Iraola, expresó a El Diario que esta problemática se presenta en forma cíclica, trascendiendo a distintos Gobiernos. "Si uno analiza datos históricos, en gobiernos de partidos políticos de diversos colores esto ha pasado cuando no debería ocurrir. La responsabilidad nuestra, desde la comunidad universitaria, es independientemente de quién sea Gobierno. Tratamos de que esto se visibilice, que la sociedad tome conocimiento de la problemática que puede acarrear el retraso en el presupuesto", dijo.
Ese inconveniente, añadió Pereyra Iraola, se observa, por un lado, en la caída del salario de los docentes, "que claramente ha aumentado por debajo de la inflación y de la paritaria que se abrió el 13 de agosto y no se llegó a un acuerdo, y por otro, tenemos el problema de las partidas presupuestarias para funcionamiento. Algo más del 90 por ciento del presupuesto universitario se destina a salarios, quedando muy poco para el funcionamiento que incluye actividades de investigación y extensión, de bienestar. Más allá del objetivo primordial que tiene la Universidad, que es formar profesionales de calidad y comprometidos con el medio, tiene otras actividades directas con la sociedad. Y todo esto se ve comprometido con el tema de las partidas de funcionamiento" que están llegando con retraso.
Con relación al funcionamiento de la obra social universitaria, el vicedecano de Ciencias Agrarias describió que el atraso que existe en materia salarial repercute en esa cuestión. "Su funcionamiento -argumentó- depende del 3 por ciento del aporte del trabajador y del 6% de la patronal. Cuando se atrasan los salarios, se congela el aporte a la obra social dentro de un marco de incremento de los prestadores, medicamentos y gasto de infraestructura en general. La obra social universitaria tiene una muy buena administración. Me atrevo a decir que es una de las mejores del país lo cual no quita que se puede complicar si esta problemática se sostiene en el tiempo".
- ¿Qué estima que puede pasar a futuro si la problemática descripta por usted se prolonga? Lo planteo a nivel universidad marplatense en general y en la Facultad de Ciencias Agrarias en particular.
- La solución, entiendo, pasa por la responsabilidad de los distintos actores de esta problemática. Me refiero al Gobierno, a las autoridades universitarias y a los representantes gremiales. Si todos apuntamos al mejoramiento de la Universidad, encontraremos una solución para salir de esta situación de atraso presupuestario. Está clara la función social que desempeña la Universidad como también que no se debe tratar de dañarla. También es importante mencionar que dentro de esta protesta estamos viendo como se hace visible la problemática con el dictado de clases abiertas en la comunidad. De acuerdo a la idiosincracia de cada facultad, estamos viendo que están aquellas que tienen un alto acatamiento a la medida de fuerza y otras que no. La Facultad de Ciencias Agrarias, por ejemplo, históricamente no ha tenido gran adhesión a los paros pero nosotros como autoridad tenemos la obligación de tener las puertas abiertas. Pueden hacer paros quienes lo deseen pero también dictar clases aquellos que no están a favor de esa medida. La solución no es con las aulas vacías, todo lo contrario.
- ¿Han reclamado ante las autoridades de la Universidad marplatense?
- Sí. El problema es presupuestario, salarial y de funcionamiento. Hubo una proclama al respecto del Consejo Superior en el que están representadas todas las facultades, planteando la preocupación existente. Incluso el Centro de Estudiantes está acompañando esta preocupación porque entiende el alcance del reclamo. Son los estudiantes quienes sufren las consecuencias.
PRESENCIAS
El reclamo universitario de ayer tuvo el respaldo de los concejales José Luis Pérez (Cumplir), ex decano de Ciencias Agrarias y exintendente, y Juan Pablo Vismara (Unidad Ciudadana), quienes acompañaron el desarrollo de las clases públicas.
