Balcarce, un polo científico y tecnológico con impacto global
El INTA y la Facultad de Ciencias Agrarias mantuvieron un enriquecedor diálogo con la Comisión de Industria, Asuntos Agrarios y Turismo del Concejo Deliberante. Participaron del encuentro Damián Defino, presidente del Consejo Asesor del INTA Balcarce; Facundo Quiroz, director del INTA Balcarce y del Instituto de Innovación para la Producción Agropecuaria y el Desarrollo Sostenible (INTA-CONICET); y Miguel Pereyra Iraola, decano de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
SEIS DÉCADAS DE APORTE AL CAMPO ARGENTINO
Damián Defino destacó que, desde hace más de sesenta años, el INTA ha sido un actor fundamental en cada etapa de transformación del sector agropecuario nacional. Desde el desarrollo rural de posguerra hasta los actuales desafíos de la agricultura sustentable, el organismo ha acompañado a productores, cooperativas, pymes y gobiernos en la generación de soluciones innovadoras.
En el sudeste bonaerense, esa tarea se potencia a partir del trabajo conjunto con el CONICET y la Facultad de Ciencias Agrarias, lo que convierte a Balcarce en un nodo clave en la articulación entre ciencia, tecnología y producción.
INNOVACIÓN APLICADA EN MÚLTIPLES FRENTES
Entre las acciones destacadas, se mencionaron los avances en reproducción bovina, diagnósticos epidemiológicos, apicultura, horticultura sustentable, producción de kiwi y cultivos de alto valor, desarrollo genético en papa, trigo y oleaginosas, así como la conservación de acervos genéticos.
También se está innovando en alimentos funcionales, tecnologías AgTech, economía circular, mitigación del cambio climático y calidad e inocuidad alimentaria, siempre con una perspectiva de desarrollo sustentable y territorial.
UN CONOCIMIENTO QUE TRASCIENDE FRONTERAS
Pereyra Iraola y Quiroz subrayaron que Balcarce no solo es reconocida por su historia automovilística o su gastronomía, sino también por su proyección como polo de conocimiento. Desde sus instituciones, se desarrollan investigaciones, se forman profesionales y se generan tecnologías que impactan en los sistemas productivos de América Latina, Europa, Norteamérica, Asia y África.
MÁS DE 500 EMPLEOS Y DESARROLLO REGIONAL
El complejo científico-tecnológico radicado en Balcarce también tiene un fuerte impacto en la economía local: sostiene más de 500 empleos directos y moviliza más de 2 millones de dólares anuales en compras de insumos, obras y servicios en la región.
Además, promueve el empleo calificado, el arraigo de jóvenes, la formación técnica y profesional, y mejora la calidad de vida de la comunidad.
La actividad científica en Balcarce también enriquece el entramado cultural. Investigadores, técnicos y estudiantes de diferentes países y provincias fortalecen una identidad local diversa, innovadora y abierta al mundo.
Esa diversidad se refleja en la vida cotidiana, en eventos, ferias, festivales y en una gastronomía que fusiona tradiciones con nuevas miradas. Balcarce se afirma así como un actor clave dentro del corredor Mar y Sierras, combinando tradición, innovación y proyección internacional.
UNA APUESTA ESTRATÉGICA CON FUTURO
La articulación entre ciencia, producción y comunidad sienta bases sólidas para el desarrollo. La transferencia tecnológica, las redes de cooperación internacional y el conocimiento aplicado en distintos continentes posicionan a Balcarce como un polo estratégico en el mapa global agroalimentario.
Invertir en ciencia y educación superior no solo fortalece la productividad: también construye comunidad, identidad y oportunidades. Balcarce es, hoy, un ejemplo de cómo el trabajo colectivo y el conocimiento pueden abrir las puertas a un futuro más justo, sustentable e inclusivo.