“Una linda experiencia y un sueño cumplido”

Martín Ottaviano junto a Diego Arnoleto, de Sukata Valencia, quien viajó para acompañar al balcarceño durante la pelea
Martín “La Máquina” Ottaviano perdió en su presentación en el programa de nivel internacional que se llevó a cabo en el Pabellón “Juan Beltrán Sierra”, en Las Palmas de la Gran Canaria. La presencia del destacado deportista balcarceño en esta realización TBC7 de The Battle Championship, una liga de MMA afincada en las Islas Canarias, se produjo a través de una invitación especial que le fue cursada en base a su trayectoria en la disciplina de las artes marciales mixtas.
El rival de Ottaviano fue el local Darwin Rodríguez, quien estuvo lejos de cumplir con el requerimiento del pesaje máximo de la divisional (93,600 kilos), mientras que “La Máquina” había superado sin problemas esa exigencia con 91,800 kilos.
Más allá del resultado negativo en cuanto a lo estadístico, quedó para Ottaviano la satisfacción de haber logrado en este momento de su carrera, a los 45 años, estar presente en un extenso programa que reunió a destacados exponentes del MMA del continente europeo.
BALANCE DE LA PELEA
Ya de regreso en nuestro país, Ottaviano hizo un balance de lo que fue su incursión por las Islas Canarias y también se refirió al trámite de la pelea.
“Fue un viaje muy desgastante, pero en definitiva una linda experiencia, viajando a otro continente y pelear en España que era un sueño a cumplir. Fuimos primero a Madrid y desde allí a Gran Canaria, con 5 horas en el cambio horario. Llegué bien, aunque hubiese necesitado algunos días más para acostumbrarme al tema del horario. Nunca me había tocado ir con tanta diferencia y tener que pelear un día y medio después. Generalmente tenés tres o cuatro días de aclimatación”, señaló.
En cuanto al trámite de la pelea comentó que “mi rival estaba mucho más pesado de lo normal. Pero ya estaba en España, listo para pelear y por esa circunstancia no iba a dejar de lado esta oportunidad que se me había brindado”.
PLANTEO SORPRESIVO
Ottaviano destacó que lo sorprendió el planteo que hizo su rival. “La pelea se presentó de una forma inesperada a lo que habíamos planeado. Pensamos que iba a salir a pelear y por el contrario acortó distancia, haciendo el trabajo que tenía que hacer yo. Llegó al piso y en el piso fue un juego de ajedrez como le decimos nosotros. Tiré una llave de rodilla, él la zafó, me tiró una llave de tobillo, lo zafé. Así estuvimos durante casi 2 minutos y medio. El tenía mucho más largo de piernas, encajó una llave al tobillo izquierdo, que casi me lleva al abandono. Pude superarlo, le tiré una llave de tobillo y en un momento donde me voy a acomodar para pararme porque estaba en una posición incómoda, logra conectarme una llave de talón que se llama caracñan, y la verdad que sonó dos veces el tobillo y abandoné porque con tantos años de experiencia en este deporte un tobillo primero suena en su parte de ligamentos y después explota la parte ósea. Prioricé la salud, a pesar de que me quedaron algunos cortes en los ligamentos de los que ya estoy rehabilitando. Un momento amargo, pero el que no lucha no gana ni pierde”.