Se resiente el comercio por la crisis económica
Comerciantes y empresarios locales viven un momento de incertidumbre, zozobra y preocupación.
El cimbronazo político que generó la renuncia del ahora exministro de Economía, Martín Guzmán, llegó de inmediato a la economía real de la mano de la suba del dólar y la disparada de las expectativas de inflación que se tradujeron en conductas defensivas de consumidores, industriales y comerciantes.
La crítica situación cambiaria y monetaria se siente en la calle, con aumentos preventivos, en algunos casos, por parte de comercios que perdieron referencia de precios y se cubren ante el temor a no poder reponer mercadería.
Pero también hay otras consecuencias, como la falta de entrega por parte de proveedores a comerciantes y PyMEs que buscaron desprenderse de pesos para quedar invertidos en bienes.
REINA LA INCERTIDUMBRE
La Cámara de Comercio e Industria local fue uno de los sitios donde socios y no socios, en gran número, plantearon su realidad, en algunos casos con desesperación.
La preocupación central, en la que había coincidencia, era la incertidumbre reinante y la necesidad de despejar la tensión financiera y cambiaria existente para revertir el panorama actual.
“El contexto de país en estos últimos días se ha puesto mucho más difícil. Es muy complicado este presente que se vive. Comerciantes y pequeños y medianos empresarios nos encontramos con múltiples problemas para comercializar, entre ellos los financieros, las altas tasas de interés, el incremento del dólar, las trabas a las importaciones, aumento de precios y faltante de mercadería, por citar algunos ejemplos”, indicó Marcelo García, presidente de la Cámara de Comercio e Industria que ayer arribó a sus jóvenes 82 años de vida institucional.
Acompañado por el vicepresidente, Pedro Panaggio, reconoció que “revertir este panorama llevará seguramente mucho tiempo. Pero mientras tanto no podemos tener frenadas las ventas y tampoco faltante de productos. Vivimos del día a día. El panorama para la actividad comercial es desolador”.
Por su parte, Panaggio, con casi cuarenta años ligado a la entidad, consideró que esta crisis que se está atravesando, de acuerdo a su parecer, es diferente a otras. “En este caso nos invade la incertidumbre. Uno no sabe en este momento qué alternativa tomar”.
Por su parte, García acotó que “para cualquier empresa y/o comercio, mantener los puestos de trabajo y afrontar el pago de la masa salarial no es tarea fácil. Y al empleado tampoco le sirve a veces el aumento que se le otorga ante este escenario inflacionario. Insisto que el panorama es muy difícil aunque deseo que se encauce la situación”.
Posicionamiento ante CAME y FEBA
A lo largo del tiempo, el vínculo entre la Federación Económica de la provincia de Buenos Aires (FEBA) y la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) no solo se ha mantenido sino que se ha consolidado, llegando la Cámara local a tener directa representación en dichos ámbitos.
“No solo respaldamos a la CAME y la FEBA sino que también gestionamos ante ellas y trasladamos inquietudes de los socios. Ambas organizaciones luchan día a día por la defensa de los intereses de los comerciantes e industriales. Asimismo, la Cámara de Comercio e Industria cuenta con el área contable, jurídica, de asesoramiento y otros servicios para brindarle al socio por lo que le pedimos que se acerque. Y lo que no está a nuestro alcance, lo gestionamos ante las entidades madre de Provincia y Nación. Y recientemente firmamos un convenio con el Instituto nacional de Tecnología Industrial, que está a disposición de aquellos que necesiten asesoramiento”, concluyó Panaggio.