Ama la cocina como la docencia. Roberto Goñi, un apasionado de la pastelería, mostró su arte en la Fiesta Nacional del Postre por segundo año consecutivo. Compartió con el público algunas de sus técnicas en chocolate y caramelo.

"Veo como va creciendo la fiesta. La gente se interesa, veo que hay muy buenos productos y buena intención en hacer cosas, que es maravilloso", aseguró a El Diario.

- ¿Cada vez hay más interés por el arte gastronómico?

- Así es. Tenemos la obligación de fomentar esto al más alto nivel y traer cosas nuevas para que la gente se entusiasme y podamos ayudarlos a progresar para que el día de mañana la Argentina, que tiene buena pastelería, la mejore aún más. Hay muy buenos profesionales locales. Los veo cuando recorro el interior del país.

- ¿Existe un auge por estudiar gastronomía?

- Por los años noventa empezó el auge por las escuelas de gastronomía. Gracias a Dios no fue una moda, algo pasajero, como algunos presumían. Eso no pasó. Los jóvenes se volcaron a esta actividad. Estamos muy bien representados y en especial, reitero, por los jóvenes.

- ¿Cocinaste el postre Balcarce?

- Cada uno tiene su fórmula. Uno como profesional tiene que meterse en la historia para saber de dónde viene y asemejar el sabor. Soy defensor de manejar los postres clásicos. Por ejemplo, una Selva Negra se hace con cereza negra, con un acaramelado y con crema chantilly, no con frutilla.

- ¿La pastelería argentina está en un muy buen nivel?

- Si, en muy buen nivel. Muchos profesionales, con el apoyo del Sindicato de Pasteleros, estamos compitiendo en Italia, en la cuna de la pastelería, de donde se están trayendo muy buenos resultados, principalmente con jóvenes, en lo que es pizza, pastelería y helados.