Medir calidad en tiempo real

 Medir calidad en tiempo real

Equipos de maquinaria agrícola vienen equipados con monitores para medir la calidad de los granos y además generan un aporte para la trazabilidad.

La Agricultura de Precisión (AP) menciona la utilización de diferentes herramientas hoy disponibles en nuestro país para generar información georre-ferenciada, con el fin de caracterizar lotes para el manejo eficiente de los cultivos e insumos de los sistemas productivos. Una de las principales herramientas utilizadas para identificar esa variabilidad de cada unidad productiva y analizar la respuesta a diferentes prácticas de manejo es el Mapa de Rendimiento.

Diego Villarroel, técnico del Inta Manfredi, aseguró que "el Proyecto Agricultura de Precisión lleva 9 años trabajando con este tipo de tecnologías y sirvió como base de experiencias para promover al desarrollo de un equipo de industria nacional a partir del año 2013, donde el Inta junto a la firma TecnoCientífica, generaron un prototipo que ya ha sido testeado en la campaña 2014/15/16 en cultivos de trigo, cebada, soja y maíz durante más de 80 horas de trabajo a campo en más de 200 hectáreas, con la generación de resultados superadores".

Cómo funciona el sistema

En este sentido, el técnico subrayó que "el funcionamiento del sistema consiste en realizar la medición de la emisión de energía del infrarrojo cercano de la muestra de granos. Dentro de la cámara de medición por medio de una lámpara se ilumina y a la vez se escanea la muestra de granos sin entrar en contacto con ella, colectando la energía reflejada a través de una fibra óptica". Además, el especialista indicó que "esta energía es comparada con los espectros que están pre cargados en el sistema de medición como curvas de calibración, que a su vez traduce el resultado de los mismos espectros a valores de interés del usuario, como ser porcentaje de proteína, humedad, grasa y almidón".

Por caso, Villarroel remarcó que "este sistema de escaneo de la muestra permite maximizar la representatividad de datos ya que el mismo acumula gran información espectral de la muestra". A su vez, el técnico añadió que "la cámara de medición está montada en la noria de grano limpio de la cosechadora y la misma toma muestras de 300 gramos de grano cada 10 a 15 segundos, lo que implica tener un dato georreferenciado cada 20 a 30 metros aproximadamente. La muestra es tomada por gravedad del flujo de granos de la noria y luego de ser analizada es regresada al mismo sistema".

A su vez, el técnico explicó que "este nuevo sistema nacional es similar al testeado por Inta desde el año 2006, solo que se lograron mejorar algunos aspectos, entre los más importantes de destacar es el sistema de escaneo de medición de la muestra, la cual genera mayor número de sub muestras". Y agregó: "Además al dato de proteína, grasa y humedad que generaba el equipo norteamericano, este equipo nacional le adiciona el almidón a la medición del maíz; una innovación con mucho potencial para el agregado de valor en origen a los granos".

Por caso, Villarroel, técnico del Inta Manfredi, valoró que "la importancia en el desarrollo de este sistema es que permite segregar la materia prima a campo y en tiempo real, buscando diferenciar calidades de los productos elaborados a partir de dicha materia prima". A su vez, el técnico también valoró la importancia en el desarrollo de este sistema es que permite segregar la materia prima a campo y en tiempo real, buscando diferenciar calidades de los productos elaborados a partir de dicha materia prima. "Esta información es muy redituable para la industria que necesita conocer los valores de proteína y aceite, en el caso de soja antes de entrar a una extrusora y evitar tener un producto elaborado con una calidad que no llega a un estándar deseado", detalló Villarroel. Pero el equipo en soja adquiere más relevancia cuando se agrega valor en origen en procesos más exigentes como texturizados de soja (Carne de Soja) o aislados y conservantes de soja donde la calidad de la materia prima es esencial. También ocurre lo mismo en el caso de trigo y cebada con los valores de proteína que permiten una industrialización diferencial.

Por último, el técnico explicó que "Además, es un aporte a la trazabilidad de los granos y contribuye al logro de la certificación de los procesos de producción primaria.