Marcha, reclamos, inauguración de una escultura y mucha emoción para celebrar
Con motivo de la celebración ayer del Día Internacional de la Mujer, se realizaron distintas actividades en nuestra ciudad. Esa fecha, cabe recordar, se estableció para conmemorar a las 129 mujeres trabajadoras y a los 17 trabajadores de una fábrica textil de Nueva York, que murieron calcinados en 1909 a partir de un incendio provocado para romper con la huelga que llevaban adelante las mujeres en protesta por las condiciones de trabajo y por bajos salarios.
Una de ellas, impulsada por varias organizaciones sociales, el justicialismo, La Cámpora e integrantes del cuerpo deliberativo consistió en una marcha, en la tarde de ayer, por las calles céntricas que culminó en la rotonda central de la plaza Libertad, donde se dio lectura a un documento a través del cual se reiteró la protesta contra la violencia machista, la igualdad de derechos en el plano laboral y el reclamo por mayores políticas públicas.
EN EL CERRO
En tanto, junto a la sede del Museo Histórico Municipal, la Escuela Primaria para Adultos N° 702, cuya dirección es ejercida por Carolina Rodríguez, adhirió a la jornada dejando inaugurada una escultura cuyo boceto fue generado por los propios alumnos y la obra la concretaron Karina y Raúl Ruidiaz y descubriendo una placa con la siguiente frase: “Que nada nos limite. Que nada nos defina. Que nada nos sujete. Que la libertad sea nuestra propia sustancia “.
Por su parte, la inspectora de la modalidad, Laura Gimaray, expresó la importancia de “sensibilizar acerca de las desigualdades que todavía existen en la sociedad y en la necesidad de avanzar en el acceso igualitario a los derechos, sin distinción de género”.
Más adelante la Inspectora lamentó que “en algunos lugares, lamentablemente hay aún una niña, una joven, una madre, una anciana, que experimentan la violencia, el acoso sexual y la desigualdad de derechos. La mujer, como persona humana, no es más ni menos que el hombre. Ambos tenemos iguales derechos. Sin embargo, por múltiples razones sociales, culturales o religiosas, en la realidad hemos sido siempre y seguimos siendo víctimas de discriminaciones”.
Si bien reconoció que se ha avanzado en materia de legislación contra la desigualdad y en cuanto a cambios de conducta social e individual, “aún queda mucho camino por recorrer. Por eso, en el Día Internacional de la Mujer, esta EEPA siente la obligación de ser garante y defensora permanente de los derechos ganados y en esta escultura se refleja el deseo de que un mundo mejor es posible si trabajamos juntos por lograrlo, sin distinción de género y con igualdad de oportunidades”.
LA EMOCIÓN DE LA DOCTORA SPINELLI
No pudo contener las lágrimas durante la lectura de su mensaje. La emoción se apoderó de ella, como lo había anticipado. Especialmente invitada por la EEPA N° 702, la doctora Carolina Spinelli dijo que “esta fecha nos compromete a seguir trabajando por una realidad más igualitaria e inclusiva…Hemos recorrido un largo camino. Muchas han sido las conquistas logradas…Pero queda mucho camino por andar. Todavía existen sectores de nuestra sociedad del mundo donde seguimos siendo vulneradas, no tenidas en cuenta, donde aún no se nos reconoce como iguales o somos víctimas de violencia. Confío en que poco falta para cambiar esta situación”.
Por último, Spinelli invitó a las mujeres “a desafiarse, a luchar por sus metas, a superarse, a animarse a dar un paso más, a sentir que nada puede detenernos, a lograr cada una su propia autonomía sin depender de nadie. Porque solo eso nos permite tomar decisiones con libertad. Estoy convencida de que nuestro único límite son nuestros propios sueños”.