Leda esparció su culto de fe y espiritualidad en una jornada histórica

Leda esparció su culto de fe y espiritualidad en una jornada histórica

El inicio de todo se dio el miércoles pasado en el Teatro Municipal, donde una gran cantidad de balcarceños se acercó para poder tener su entrada, ese pasaje para ver a una figura divina o tal vez, para reforzar esa espiritualidad tan “cascoteada” por la realidad que viven todos los días.

Aquel acto fue ordenado, tranquilo. El Municipio entregó las 4.000 entradas disponibles para las personas de Balcarce. Tras la última entrada entregada, comenzó a gestarse el evento de Leda Bergonzi.

ELLA

Todos los martes, los feligreses asisten a la Catedral de Rosario con la esperanza de ser tocados por el don divino de Leda Bergonzi, una mujer que hace nueve años recibió los carismas de la liberación y la sanación de la Iglesia Católica. Leda Bergonzi es una rosarina de 44 años, conocida como sacerdotisa, aunque es laica y no tomó ningún voto religioso. No viste túnicas ni velos, solo jeans y blusas blancas. Lleva una vida común: trabaja, está casada, tiene cinco hijos y una nieta.

Celebra sus misas de sanación junto a su grupo de oración, Soplo de Dios Viviente, que la acompaña con alabanzas antes del momento de imposición de manos. La catedral recibe a cientos de creyentes que esperan pacientemente a que ella se les acerque, los toque, ore y les hable en diferentes lenguas.

EL INGRESO

“La sanadora de Rosario” realizó su presentación este sábado en el Polideportivo Municipal y el ingreso generó una gran ola de vehículos que esperaban acceder al predio para poder ubicarse y así estar más cerca de Leda. Varios vehículos esperaban desde el viernes por la noche la apertura de las puertas de ingreso, que se dio ya el sábado a las 7 de la mañana. El mencionado ingreso se dio con dos filtros, como se había anticipado desde un primer momento desde el Municipio. En ese marco, el primer filtro se concretó en la ruta 55 y el segundo en la entrada al “Poli”.

Desde las 7 de la mañana, efectivos de la Estación de Policía Comunal y de Movilidad y Control Urbano en la avenida San Martín estaban apostados en aquel sector para garantizar que los asistentes circulen con precaución.

LA JORNADA

La jornada arrancó con ciertas dudas. Entre jueves y viernes se registraron algunas lluvias y tormentas fuertes, lo que hacía dudar un poco a quienes organizaron el evento: el Municipio en conjunto con las parroquias “Santa María” y “San José”. La mañana había comenzado algo nublada. Por otra parte, algunos caminos del “Poli” se habían “ablandado” producto de las lluvias incipientes del día anterior.

Además, en las labores del evento, también ayudó personal de la SubDDI, del Hospital Municipal, de Bomberos Voluntarios, Socorristas, Policía Vial, personal de Vialidad Provincial y colaboradores en general.

Tras la apertura de las puertas, se dio inicio al ingreso. En primer lugar y como se había dicho durante la conferencia de prensa donde se detalló el evento, se le dio prioridad a personas con movilidad reducida, con discapacidad o que están atravesando algún inconveniente de salud. Las primeras mil personas fueron colocadas en el gran salón del Polideportivo. El resto en carpas y un gran sector al aire libre. Quienes se encontraban al aire libre, podían seguir todo lo que ocurría dentro del salón, mediante una pantalla gigante dispuesta para la ocasión.

El inicio de la actividad tuvo cantos y rezos, en espera de la llegada de Leda. Se dispusieron baños químicos, así como también se habilitaron los que se encuentran en el Polideportivo.

Por otra parte, se ubicaron en el fondo diferentes food trucks de vecinos que ofrecían comida o agua caliente para el mate o café para afrontar el eventual fresco de la jornada.

También estuvo presente el Taller Protegido de Producción Balcarce con una exquisita oferta de tortas fritas, pañuelitos, pasteles, empanadas, choripanes y mucho más.

LA DEMORA

Para las 10 de la mañana, se esperaba que Leda llegara al “Poli”, para formar parte de la misa, que tenía una duración de dos horas, en la que ella cantaría y oraría. Pero eso no ocurrió, sino que sucedió más tarde. La razón de la demora es que “La sanadora de Rosario”, había sido invitada al programa de Mirtha Legrand y la grabación se realizó el viernes. Viajando por la mañana y al imposibilitarse su llegada por la lluvia, Bergonzi se hizo presente en el “Poli” el sábado alrededor de las 13:15.

LA LLEGADA DE LEDA

Finalmente llegó. Ante una buena cantidad de personas, entre colaboradores y periodistas, la sanadora bajó de la combi que la traía y habló brevemente ante la requisitoria periodística: “estoy con el anhelo de ver a todas estas personas, de que se reencuentren con Dios. Nosotros venimos trabajando y transitando este tiempo, que es de mucha gracia. Lo vemos en cada lugar al que vamos. Sentimos el amor con el que siempre nos reciben las comunidades, los hermanos. Eso también nos impulsa para continuar y siempre estamos mirando hacia el otro”.

Consultada sobre qué es lo que siente cuando realiza la imposición de mano, Leda, sostuvo: “realmente yo soy un instrumento, yo lo digo siempre. En ese momento, humanamente siento muchas veces que no estoy. Es un trance, es un momento en el que también estoy con Jesús, así que lo vivo de otra manera. Pero siempre con mucha paz”.

Ante aquellas personas que tienen inconvenientes y la necesidad de conocerla en una clara expresión de fe, Leda, expresó: “todos los que se acercan, lo hacen buscando a Dios. Él permitió que todo esto esté ocurriendo, son todos signos de sanación, de liberación que nos están acompañando. Son parte también de lo que Dios dispuso en este tiempo, entonces todos los que vienen a buscarlo, seguramente lo van a recibir. Entonces a la gente yo les digo que sigan así, que continúen con esa búsqueda, en esa entrega que yo también la tuve y confiados en un mismo espíritu como estamos todos”.

Respecto de su don, el don de la sanación, Leda indicó: “hace 11 años que estoy caminando esto. Y hace dos años en que la gente se enteró de esto en forma masiva, que se empezó a aglomerar tanta cantidad de personas. Vamos hace muchos años caminando, descubriendo todo este paso de Dios y abrazándolo con fe. A mí este don me cambió la vida”.

Dejando un mensaje para las personas de Balcarce que no pudieron asistir a su encuentro, “La sanadora de Rosario”, pronunció: “que Dios bendiga a todos los que no pudieron llegar. Vamos a clamar por todos: por los que están, por los que no están, por los que tienen foto, por los que no, a los que traen en su corazón, sabiendo que Dios eligió este lugar para que se derrame este Espíritu Santo y que podamos llegar a todos los hogares”.

PRESENTACIÓN E IMPOSICIÓN DE MANOS

Tras la requisitoria periodística, Leda, entró al gran salón y llevó a cabo su presentación. Cantó, rezó, habló en diferentes lenguas y posteriormente realizó, lo que para muchos es la verdadera esencia de sus presentaciones, de tanta expresión de fe, de una gran masividad: la imposición de manos. Al ser un momento íntimo y respetando a cada una de las personas a las que se les impuso las manos, no se permitió el registro de material fílmico ni fotográfico. Dicen, personas que incluyo no llevan muy arraigada la fe y que estuvo presente, que es un momento que difícilmente pueda ponerse en palabras, que es inexplicable.

FINAL

Tras la imposición de manos, Leda hizo lo propio con cada uno de los voluntarios y colaboradores que llevaron adelante el evento que la tuvo a ella como eje central, como tuvo de principal protagonista a la fe, la férrea voluntad de algo o alguien en qué creer, a lo qué aferrarse, cuando la cuestión es compleja y difícil.

Alrededor de las 20 se dio por finalizado el evento y el trabajo de una maratónica jornada, que quedará en la historia de los sucesos de Balcarce.