Jubilada de nuestro medio volvió a robar en Mar del Plata
Una jubilada de nuestro medio volvió a robar en la vecina localidad de Mar del Plata, más concretamente en un reconocido café ubicado en Hipólito Yrigoyen esquina San Martín. Al igual que en anteriores oportunidades, la mujer se hizo de una cartera y la descartó a metros del lugar tras quitar el dinero en efectivo que encontró en la billetera.
“Estaba sentada en el café y cuando pedimos la cuenta y voy a pagar me doy cuenta que me habían robado la cartera”, explicó en diálogo con el portal marplatense 0223 la víctima, que aún no sale de su asombro. Al darse cuenta del faltante, la mujer pidió las cámaras de seguridad del comercio y con el material se dirigió a la comisaría primera a realizar la denuncia.
Mientras se dirigía a la seccional policial, realizó la denuncia de robo de las tarjetas de crédito y débito para asegurarse que nadie desfalque sus cuentas, pero cuando llegó al departamento policial, la sorprendió la información que recibió luego de que el efectivo policial que le tomó la denuncia vea los videos que le mostró como prueba del hurto: la ladrona era una jubilada que tiene más de 65 causas por hurto y por su condición psicológica es considerada por la Justicia como inimputable.
“Cuando estaba en la comisaría vino una mujer que había encontrado mi cartera a dejarla porque no me había podido ubicar en redes sociales. Me dijo que la cartera la habían tirado en el puesto de flores de Belgrano y La Rioja”, relató la víctima al tiempo que resaltó que solo se llevaron el dinero en efectivo que tenía dentro de la billetera. El resto de los objetos que guardaba en el accesorio estaba intacto. “Enseguida hice la denuncia, me quedé ahora con todas las cuentas bloqueadas hasta que me lleguen las tarjetas nuevas, por suerte solo se llevó la plata y dejó la documentación que tenía en la billetera”, dijo.
“No puede ser que no se pueda hacer nada. Todo el mundo la conoce”, sostuvo la mujer en referencia a su victimaria, una jubilada oriunda de nuestra localidad que fue declarada inimputable por la Justicia tras comprobar que padece Trastorno de Control de los Impulsos de tipo cleptómano, por lo que no puede controlar su deseo de llevarse objetos que encuentra a su alcance, aunque no tenga necesidades económicas para hacerlo.