Hace 28 años, cuando nació, fue separada de su madre; hoy quiere reconstruir su pasado
Es difícil imaginar cómo puede sentirse alguien al descubrir, después de haber vivido más de 20 años, que el comienzo de su vida está inmerso en una gran nebulosa; que nada de lo que tuvo como cierto era así.
Jésica Mariana (así, sin apellido) atraviesa esa situación.
Radicada en Mar del Plata, con sus actuales 28 años, descubrió (por terceros) hace muy poco tiempo que quienes la criaron desde el momento en que llegó al mundo no son su padres. Ahí se derrumbó la historia de su pasado, al me nos el que hasta ese momento conocía, y la llevó a decidir salir a la búsqueda de la verdad. Una verdad que tendría su origen en Balcarce.
Jésica narró a El Diario que hace alrededor de tres años por una prima conoció que era adoptada, algo que sospechó en algún momento pero sus padres adoptivos siempre le negaron,
"Lo hablé con ellos y no lo negaron, pero me dijeron que no sabían nada en relación a la identidad de mi verdadera madre. Sabía que no me iban a ayudar, en estos tres años no me acompañaron en nada", comentó manifestando que por tal motivo cortó toda relación con ellos.
"Es una mezcla rara de sentimientos, cuando te enterás de lo que es una adopción por izquierda… primero pensé sobre la burocracia, las dificultades para adoptar, los deseos de tener un hijo… todo era entendible pero después de tantas mentiras durante tantos años dejé de entender todo y me llevó a alejarme de ellos Les dije que prefería no tratarlos más porque no me hacía bien y decidí salir por mi cuenta a buscar mi verdadera identidad , la de mis hijos…Quiero encontrar a mi mamá quiero ponerle una cara a esta historia , sin juzgarla, ya que con la corta edad que tenía , no quiero entrometerme solo quiero saber de donde vengo, como fueron mis primeros momentos.
Sin preguntar motivos ya que a los 14 o 15 años seguramente no fue ella la que decidió algo. En esos tiempos no se decidía como se decide ahora. No juzgo porque sé que hay muchas hipótesis en estos casos. No quiero irrumpir en su vida sino cerrar mi historia".
Jésica empezó a buscar su pasado.
Fue en medio de ese difícil camino que pudo saber que nació a fines de diciembre de 1989 en una casa ubicada en las calles Jujuy y Luro, de Mar del Plata, donde una partera (ya fallecida) se ocupaba de traer al mundo bebés en forma clandestina.
EN LA BÚSQUEDA DE LA VERDAD
También supo que a ese lugar llevaron desde Balcarce a su madre, cuando ésta tenía entre 14 y 15 años.
"A mi madre la trajeron a tener familia acá, creo que la trajo su mamá, hicieron el parto, me dejaron con la partera que ya sabía lo que tenía que hacer y a mi mamá la volvieron a llevar a Balcarce", narra.
Esas son las pocas certezas que tiene hasta el momento. Y ese es el principio de su verdadera vida, la que busca conocer.
"Son pocos los datos que tengo, no tengo un nombre, no tengo un apodo, nada más que eso. Esos datos los conozco desde hace poco porque alguien me los manda por un Facebook 'trucho'. Yo había hecho un movimiento grande en Mar del Plata sin resultados pero ahora espero avanzar en Balcarce. Sé que estos casos de partos en domicilios particulares por lo general se dan en menores que las familias quieren ocultar todo. Espero que aparezca alguien que aporte algún dato: un familiar, un amigo, un vecino. Seguramente a ella durante un tiempo la tuvieron aislada para ocultar el embarazo pero en la escuela, una maestra, los compañeros, los vecinos, quizás alguien pueda marcarme el camino por donde avanzar", sostiene abrigando la esperanza de poder descubrir su verdadera identidad, armar su verdadera historia.