En menos de 30 años, se multiplicó por 12 el consumo de fertilizantes en el campo
Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, durante el año 2017 el consumo de fertilizantes en nuestro país creció un 4,4 % respecto al año anterior, lo que lo llevó a alcanzar los 3,77 millones de toneladas. Este registro marca un nuevo récord a nivel nacional, al superar los 3,72 millones de toneladas que se utilizaron en el año 2011.
La editorial de la última edición de la revista de la Asociación Civil Fertilizar, señaló que la relativa mejora en el manejo de las gramíneas fue lo que traccionó el crecimiento del mercado.
El cultivo de soja fue el más postergado en cuanto la incorporación de nutrientes debido a la aplicación de dosis muy bajas como al bajo porcentaje de área fertilizada. En este contexto, aún queda mucho por hacer para alcanzar una óptima reposición de nutrientes y achicar las brechas productivas para obtener más rendimientos.
Sin embargo, mirando la evolución de este dato en el largo plazo, se puede observar un gran crecimiento en el uso de fertilizantes en la agricultura nacional a partir de comienzos de la década del 90. Esto muestra el importante desarrollo del sector en cuanto a competitividad, tecnificación y eficiencia. En el año 1990 se consumieron 300 mil toneladas.
El crecimiento respecto del año 2017 (en 27 años) fue de un 1.156 %, es decir, el uso de fertilizantes en la producción local se multiplicó por poco más de 12 en menos de 30 años.
CRECE LA PRODUCCION LOCAL
Durante 2017, la producción local de fertilizantes fue de 1.942.400 toneladas, el registro más alto de los últimos 6 años. Lo mismo puede decirse de las exportaciones, las que ascendieron en el 2017 a 4,8 millones de toneladas.
Es importante destacar que los fertilizantes de mayor consumo en Argentina se pueden clasificar en dos grandes grupos según el tipo de nutriente: los nitrogenados (UREA, UAN y otros), cuyo principal insumo es el gas natural, y los fosforados (diamónico, monoamónico, súper fosfato triple y simple entre otros) que se producen en base a roca fosfórica.
En el sector agropecuario argentino, el 52,8 % de los fertilizantes utilizados durante el 2017 correspondió a los de tipo nitrogenados (cuya demanda se satisface principalmente por producción local) y el 38,6 % a fosfatados (que en su mayoría se importan).
LA DEMANDA
La demanda de fertilizantes en nuestro país se concentra en los principales cereales y oleaginosos cultivados en el país. El 70% de la utilización se distribuye entre los tres cultivos con mayor superficie sembrada: soja, maíz y trigo. Según los datos de Fertilizar para la campaña 2016/17, los últimos disponibles, se puede notar la importancia de los cereales para el mercado de fertilizantes, principalmente el trigo y el maíz, que en conjunto acapararon el 58 % del consumo total de ese tipo de insumos.
El uso de fertilizante por hectárea implantada es mayor para estos cultivos. La importante participación del cultivo de soja responde a la gran dimensión del área sembrada con la oleaginosa -casi 20 millones de hectáreas-, la cual duplica la superficie agregada de maíz y trigo.