Cerca de cien hectáreas con rastrojos y cultivos fueron consumidas por el fuego

Cerca de cien hectáreas con rastrojos y cultivos fueron consumidas por el fuego

Los bomberos se enfrentaron a densas columnas de humo

La combinación entre altas temperaturas, la sequía, el viento reinante y la imprudencia fueron factores que desencadenaron un incendio de proporciones en lotes ubicados en la zona rural próxima a donde se encuentra el Instituto Adventista Balcarce, a la altura del kilómetro 79 de la ruta nacional 226.

El fuego se originó en una cava donde funcionara una cantera, en la cual se arroja basura. La acción del viento y la falta de humedad en el suelo, sumado a un descuido, permitieron que rápidamente las llamas avanzaran sobre un rastrojo de cebada.

Atendiendo a la magnitud que iba tomando el incendio se convocó a los bomberos voluntarios. Inicialmente partieron del cuartel de calle 2 al mando del jefe, comandante Fernando Alessio, tres dotaciones. Posteriormente se sumaron dos más y otra procedente del cuartel de Coronel Vidal, al cual se le pidió colaboración. Por su parte, la Municipalidad colaboró aportando una cisterna para proveer de agua a las autobombas distribuidas en diferentes puntos estratégicos para atacar el siniestro.

No pudieron los servidores públicos evitar que las llamas atraviesen el camino. Así fue como el foco ígneo, del cual emanaban densas columnas de humo, se extendió sobre otros lotes, entre ellos los pertenecientes a Raúl González y la familia Belmonte, que estaban sembrados con maíz de segunda y pasturas, partes de los cuales sufrieron las consecuencias. También se vieron afectados alambradas, plantas y cuatro colmenas. Sí se evitó que se viera dañada una antena de telefonía celular instalada en el lugar.

Se estimaba anoche que cerca de cien hectáreas fueron consumidas por la acción del fuego, finalmente controlado y extinguido por la labor de más de 30 servidores públicos que además contaron con la colaboración de productores de ese sector del distrito.

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Mientras se libraba una dura batalla en cercanías al Instituto Adventista Balcarce, otros bomberos estaban atentos en el cuartel central ante algún imprevisto. Fue así como debieron efectuar dos intervenciones por incendio de pastizales. Uno en la zona de Ramos Otero y el restante en un terreno de calle 2 entre 33 y 35.

Cerca de cien hectáreas con rastrojos y cultivos fueron consumidas por el fuego