Papas fritas para snack producidas en Balcarce se exportaron por segunda vez a Alemania. Se trata del producto «Gauchitas» que se elabora en el sector planificado El Molino I, sobre la ruta provincial 55, a metros de El Cruce. El emprendimiento nació hace cuatro años por una iniciativa familiar encabezada por el empresario marplatense Juan Rosenthal.

El primer envío se concretó sobre fines de 2018 y en esta oportunidad, según le contó el empresario a El Diario, se triplicó el volumen de la mercadería enviada, elaborada con materia prima propia, siendo el proceso completamente artesanal desde el corte del tubérculo hasta la fritura y el salado del producto premium.

Rosenthal contó que con asesoramiento profesional se cambió el packaging con vistas a que los envases sean más atractivos pero además con toda la información del producto en alemán.

El cargamento con las especialidades papas fritas Sal Marina y Pimienta Negra de «Gauchitas» llegará a las góndolas de las cadenas de almacenes Karstadt y Kaufhof, distribuidos a lo largo y ancho del gigante europeo.

Consultado sobre cómo surgió la posibilidad de exportar, el empresario indicó que «el dueño de las galerías alemanas Kaufhof, de visita en Capital Federal, fue a un supermercado y probó las papas y quedó encantado con el sabor. También le gustó el nombre ‘Gauchitas’ por un cántico de fútbol que surgió cuando Alemania le ganó a Argentina la final de fútbol en el año 2014 en Brasil. Cuando los hinchas llegaron a su país, cantaban que le habían ganado a los gauchitos. De ahí el dueño asoció que podía tener cierta atracción para sus clientes».

Si bien entiende el socio de «Gauchitas» que aún el volumen exportador no es muy elevado, resulta por demás interesante que se haya abierto ese canal de comercialización a través de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, lo cual le ha permitido a la firma estar incluida en el Registro Nacional de Exportadores.

Pero más allá de ese perfil exportador, Rosenthal también está satisfecho por el grado de penetración del producto, elaborado en base a un concepto de comida saludable, en el gusto del cliente al cual llegan a través de múltiples canales de venta, entre ellos grandes cadenas de supermercados.

SUEÑO Y REALIDAD

«Uno tiene sueños y esos sueños los volcás en metas. Los vaivenes de la economía hicieron que fuera lento el proceso de crecimiento de la empresa. Pero los socios aguantan y siguen adelante con el emprendimiento. No es fácil meter una marca nueva en el mercado. Acá hay mucho trabajo y esfuerzo sabiendo que la inversión se recuperará en muchos años», acotó.

En materia de prioridades, el empresario adelantó que se está estudiando para fines de este 2019 la posibilidad de poder duplicar los turnos de producción ante la creciente demanda, y el siguiente paso sería poder adquirir una freidora más grande.

«Resulta increíble que un producto elaborado en Balcarce se venda en Alemania. Pero hay varios actores que colaboran para que lo que parecía un sueño, hoy sea una realidad como lo son organismos de Nación, Provincia y Municipio, el INTA y la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, entre otros», concluyó.