Vendió KWS el negocio de maíz y sorgo a un semillero argentino en expansión
El mercado de semillas se vio sacudido en las últimas horas por una noticia impactante. La empresa Grupo Don Mario (GDM) informó la «adquisición estratégica» del negocio del maíz y sorgo de la firma alemana KWS, con casa central en Balcarce, que instrumenta en toda Sudamérica.
De esta forma, la firma oriunda de Chacabuco, que actualmente tiene el 50 por ciento del mercado nacional de la soja y el 35 por ciento en trigo, avanza en su estrategia de diversificación con el maíz.
Para el semillero nacional, esta operación «representa un hito significativo en la consolidación de GDM en cultivos extensivos en Sudamérica. La empresa global en genética vegetal amplía su alcance y avanza en su estrategia de crecimiento a partir de la diversificación de cultivos extensivos, mediante la compra del negocio de maíz y sorgo de KWS en Brasil y Argentina», indicó.
LA OPERACIÓN
La transacción comercial anunciada recientemente incluye todas las actividades de mejoramiento y venta de maíz y sorgo en América del Sur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) de KWS, así como todos los sitios de producción de maíz y sorgo en Brasil y de maíz en Argentina, involucrando a alrededor de 700 colaboradores.
«La solidez del negocio que KWS ha construido en Argentina y Brasil hacen de esta operación una adquisición clave para GDM. La incorporación de la posición y know-how de KWS en maíz, junto con la adquisición de Biotrigo en 2023, consolida a GDM como una empresa relevante en cultivos extensivos en Sudamérica, evidenciando el progreso de su estrategia de crecimiento», añadió la compañía local.
Según Ignacio Bartolomé, CEO de GDM, «la combinación de la posición en maíz de KWS con el conocimiento en genética vegetal, con foco en soja y trigo, de GDM crea una sinergia y fortaleza únicas para nuestra posición en el mercado y el avance continuo de nuestra compañía».
«Seguiremos trabajando en estrecha relación con toda la cadena del agro, con el propósito de continuar aportando los últimos avances en tecnología aplicada a la genética vegetal, con el productor como nuestro principal foco y el rinde como objetivo central», agregó.
OBJETIVOS
Por otro lado, GDM dijo que buscará dar continuidad y potenciar el negocio desarrollado por KWS, destacado por sus notables características agronómicas.
En este marco, insistió en que lo que está incluido en esta transacción es el negocio de maíz y sorgo en Sudamérica, y no el resto de las operaciones que KWS tiene en esta región del mundo.
«Todas las actividades de hortalizas, remolacha azucarera y los programas de mejoramiento contra estacional de la cartera europea de maíz y remolacha azucarera en Brasil, Chile y Perú permanecerán con KWS, y el negocio europeo de maíz de KWS no se verá afectado por la transacción», precisó GDM.
«En América del Sur, hemos establecido una posición sólida en el mercado de maíz, algo de lo que estamos muy orgullosos. Sin embargo, para implementar los objetivos estratégicos del grupo KWS con plena fuerza y enfoque, hemos decidido que este es el momento adecuado, en términos de madurez empresarial, para encontrar un socio que esté en una posición sólida para llevar el negocio de maíz en América del Sur al siguiente nivel», comentó, por su parte, Nicolás Wielandt, miembro de la Junta Ejecutiva, responsable del negocio de maíz de KSW.
Y remató: «Estamos completamente convencidos de que GDM es la elección acertada, tanto desde una perspectiva cultural como en lo que respecta a su posición empresarial complementaria. Con GDM como nuevo propietario, surgirá un jugador fuerte que buscará crecer aún más en el mercado sudamericano de soja y maíz».
En este marco, Bartolomé respondió: «Estamos entusiasmados de dar la bienvenida a KWS a la familia de GDM y esperamos trabajar juntos para impulsar la innovación y hacer una diferencia positiva en la agricultura a nivel global».
«Esperamos con mucho interés y expectativa los avances y logros que surgirán próximamente a partir de esta adquisición, y estamos ansiosos por compartirlos con nuestros clientes y aliados en todo el mundo», adicionó.
Un aspecto a tener en cuenta es que las partes acordaron no relevar los detalles de la transacción ni el importe exacto del precio de compra.
Ahora, lo que resta es que estos acuerdos de transacción sean sometidos a la aprobación previa del Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) en Brasil y de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia en la Argentina, conforme aplicable.