No fue un día particularmente de esos agradables, de hecho, la mañana de este lunes estuvo signada por los fuertes vientos y algunas lloviznas. Algunos dirán, que fue la forma del cielo de expresar sus respetos.

El sencillo acto, fue para llevar a cabo la inauguración oficial en la plazoleta de Av. Favaloro entre 22 y 24 de un memorial en homenaje a los vecinos de nuestro medio que fallecieron causa del covid-19.

Ya lo explicarán algunos de los protagonistas, la idea surgió hace poco más de 3 años, cuando familiares de aquellos vecinos fallecidos, decidieron convertir ese dolor, esa ausencia en algo más, en una iniciativa, un proyecto que rindiera homenaje pero que además recordara una de las épocas más difíciles que se atravesaron como sociedad.

La obra en cuestión, fue titulada "Trascendencia": "que designa a aquello que va más allá, que atraviesa el límite, que supera una barrera. Ir más allá de los límites, las creencias y los egos. Trascender los estados emocionales. Uno no sabe cuánto tardará en superar un duelo, un dolor, pero puede confiar en lo que trascenderá. Trascender, implica crecer y aprender, no juzgar, confiar y superar lo niveles de conciencia para explorar nuevos significados y oportunidades en la vida", con esa alocución, comenzó el acto.

EL MEMORIAL

Los artistas que pusieron manos en la obra, fueron Manuel Pastorino, Joaquín Martins y Analía Pelaia, esta última fue la encargada de explicar el significado del memorial y de hacer los agradecimientos pertinentes: "esto no sería posible para mí, sin el apoyo de Joaquín (Martins) y de Manuel (Pastorino).

Como artistas quisimos acompañar a los familiares a transformar el dolor en una obra que deje un mensaje. A pesar del contexto vivido, creando este espacio, pretendimos generar un punto de reunión donde la gente recuerde lo vivido en ese momento histórico. Que honren y recuerden a familiares, amigos y vecinos que ya no están. Es por eso que lo llamamos 'memorial'. Es un espacio, un monumento conmemorativo que tiene por objetivo, preservar la memoria de un hecho y es de carácter público. Se pretende honrar la memoria de las víctimas de un hecho para no olvidar la historia y concientizar a las personas. Es un espacio para la reflexión.

Justamente, reflexión y contemplación es lo que Joaquín (Martins), Manuel (Pastorino) y yo quisimos generar.

Esta historia se inicia en octubre de 2021, cuando comenzó a organizarse un grupo de familiares decididos a rendir homenaje a esos seres queridos que no pudieron despedir durante la pandemia, debido a las medidas sanitarias restrictivas de ese momento. Silvina y Gabriela Fasciglione junto a las hermanas Cristina y Nuria Ramírez solicitaron mi colaboración para darle forma a esa necesidad imperiosa de cerrar el ciclo de desconsuelo, pesar y angustia.

Así empezamos a trabajar en el diseño de diferentes imágenes que lograran expresar aquello que necesitaban decir, utilizando una técnica que sea perdurable al paso del tiempo.

Así surgieron las alas, ese símbolo de ascensión, de ligereza. Tan sútil y sin embargo tan sentido. Las imaginé en mosaico y de inmediato pensé en Joaquín Martins, reconocido artista y arquitecto de nuestra ciudad de gran sensibilidad quien aceptó enseguida la propuesta.

Cuando se modificó el lugar donde estaría emplazado este memorial, se cambió la idea de la estructura: se planteó un espacio de contemplación, que sirva de refugio espiritual y de recordatorio para aquellos que partieron.

En cuanto a las esculturas, pensamos en Manuel Pastorino, talentoso escultor y artista para ubicar la obra y reforzar el sentido de lo que se quería expresar.

También va el agradecimiento para Haydée Melograno y Lucila Méndez, quienes le aportaron a este memorial: desde un espacio verde, hasta la escritura del poema 'Recuerdame' de David Harkins. Por otro lado, el agradecimiento a las 24 mosaiquistas que desde diferentes ciudades del país, colaboraron con este proyecto enviando sus alas.

Los materiales que utilicé para las alas grandes, fueron donaciones de cerámicos, azulejos, mármol y sobre todo vajilla que fueron utilizadas por las personas que ya no están.

Fueron muchas las personas que ayudaron en este proyecto, como Ezequiel Maitía que donó todo el trabajo de pintura electroestática para que la parte metálica de la obra sea resistente a la corrosión. Extensivo el agradecimiento a todas las personas que colaboraron en cada etapa de este memorial".

Tras las palabras de Analía Pelaia, se procedió al descubrimiento del mural, que fue llevado a cabo por familiares de los vecinos fallecidos, que impulsaron la iniciativa.

BENDICIÓN

Con el descubrimiento consumado, llegó el momento de la bendición, concretada por el Padre Pablo Etchepareborda, quien visiblemente emocionado, expresó: "a muchos (de los fallecidos) no pudimos acompañarlos, no pudimos estar cerca, no pudimos saludarlos, no pudimos darles un beso o un abrazo.

Ese es el recuerdo, los agujeros como se mostraban. Los agujeros que quedan en nuestras casas, en nuestras familias, en nuestra ciudad. Sin embargo nos hablan de la esperanza, de que trascendemos estos momentos más allá del recuerdo triste y doloroso, este va a ser un lugar fundamentalmente de reconciliación, de abrirnos al futuro, de mirar hacia adelante porque tuvimos que despedir como pudimos hacerlo a nuestros seres queridos y la vida continuó. Veo niños, que no estaban aquellos días, nacieron después. La vida continúa, nuestra vida continúa. Y si bien han fallecido nuestros seres queridos, nosotros no podemos quedarnos 'muertos', al contrario: en honor a ellos tenemos que seguir vivos, con toda la fuerza, con toda la esperanza, con todo el deseo de trascender, de construir algo mucho mejor.

Que este lugar de memoria sea un lugar de reconciliación con el pasado, con el presente y nos anime a transitar un futuro lleno de cosas buenas, de solidaridad, de amor, de paz, de reconciliación, de alegría. ¿Cuántas cosas nos tenemos que perdonar? ¿A cuántos tenemos que perdonar? ¿Cuántos en familia tenemos que perdonarnos? Si no lo hacemos, viviremos recreando el dolor, una y otra vez. Del dolor, se sale con amor. Eso tenemos que tratar de experimentar".

Por otro lado, brindó sus bendiciones el titular del Consejo Pastoral de Balcarce, José Espinosa.

PALABRA DE FAMILIAR

En una de las últimas acciones del acto, Silvina Fasciglione, quien tomó la palabra en nombre de los familiares de los vecinos fallecidos a causa del covid-19 y una de las impulsoras de la iniciativa expresó a los presentes: "es un día emotivo y movilizante para los aquí presentes. Nos tocó vivir y atravesar una situación impensada: despedir a un ser querido en una pandemia. Junto a mi hermana perdimos a una de las personas más amadas por nosotras: nuestro padre. En un lugar poco feliz y que aún cuesta nombrar, conocimos a Nuria y Cristina Ramírez quienes sufrieron la misma pérdida.

Con nuestro desconsuelo y el dolor a cuestas, surgió la idea de hacer un homenaje a aquellas personas que perdieron la bata-