Triste: la bandera que Susana nos legó y nunca pudo ver flameando
En el marco del acto central del sesquicentenario del partido de Balcarce, el 31 de agosto de 2015, el entonces intendente Municipal José Enrique Echeverría anunció que desde ese momento Balcarce tenía su bandera propia.
Norma Susana Berroa había resultado ganadora del concurso realizado para tal fin.
En el escenario, el jefe comunal distinguió a la autora del dibujo que en poco tiempo más -dijo- sería llevado a la tela y se transformaría así en nuestro emblema.
Llegaron las elecciones y las "prioridades" eran otras, la bandera "podía esperar".
El resultado adverso dio paso a un período en el que el ánimo no daba para esas "nimiedades".
Con la asunción de las nuevas autoridades se abría la posibilidad de reflotar el proyecto… pero no fue así.
Las dificultades económicas fueron el nuevo freno para llevar adelante la iniciativa.
"No hay plata…" fue la contestación que recibió Berroa cuando intentó saber los motivos por los cuales todas las promesas fueron quedando tan solo en eso, promesas…
Incluso llegó a ofrecer poner ella misma el dinero necesario para ver plasmada en tela su creación.
Ni así logro avanzar. La bandera , "su, bandera, "nuestra" bandera siguió siendo una utopía por la que luchó hasta donde tuvo fuerzas.
Una cruel dolencia la doblegó; hace pocas horas Norma Susana Berroa cerró sus ojos para siempre sin haber podido ver flamear la enseña que hace casi un año fue elegida como la que nos representaría en los mástiles de escuelas y edificios públicos.
Hoy, lamentablemente, hay cosas imposibles de revertir, pero quizás -en su memoria- sería importante que alguien se ocupe de reflotar el proyecto y que al menos su familia pueda ver en poco tiempo más la enseña de nuestra patria chica que ella nos legó.
EL SUEÑO QUE NO FUE
"Cuando la vea flamear imagino que voy a terminar de vivenciar todo"
Pocos días después de haber sido anunciada como la autora del dibujo ganador, Norma dialogó con El Diario explicando entonces, sin aún poder terminar de asimilar la importancia de lo que significaba haberse transformado en "la Belgrano balcarceña" como la apodaron en su familia, aseguraba que no alcanzaba a dimensionar lo que estaba sucediendo.
"Cuando la vea flamear imagino que voy a terminar de vivenciar todo. Incluso va a quedar para mis hijos, mis nietos… que esa bandera la he realizado yo… será algo muy especial. Es mi proyección de toda mi tarea en la docencia. Fueron muchos años de docente y esto termina de cerrar mi vida en relación con la escuela" manifestó imaginando entonces su sentir cuando tuviese la posibilidad de ver flamear su obra, "nuestra" bandera.
Las miserias humanas y las trampas que nos pone la vida hicieron que Susana partiera sin ver su obra terminada.
LA BANDERA
El trabajo, que nunca fue presentado de manera oficial, es, según dijo su autora en septiembre de 2015 a El Diario, "una síntesis de lo que es Balcarce. Circunscripta en un círculo que sería un volante de auto, muy abstracto, donde están el campo, con sus distintos colores, las sierras, la bandera de cuadros del automovilismo y otros detalles que hacen a nuestro distrito. Todo enmarcado en el centro de un palo que es en sí la bandera"