Manuel Pastorino: “Todos los días aprendo, nunca hago un trabajo igual al otro”
El acceso a la Reserva Fangio, por calle 95, goza desde hace unos días de un distintivo artístico que ya recibió múltiples y positivos comentarios. Se trata de una obra realizada por Manuel Pastorino, que embellece sin dudas el ingreso al lugar, el cual cuenta con visitantes asiduos tanto sea en la diaria como en los fines de semana.
Por allí desfilan muchos deportistas, delegaciones de establecimientos educativos, amantes de la naturaleza y tantas personas que se llegan hasta allí para disfrutar, cada cual a su manera, de las bondades que el mismo ofrece. Paisajes, colores, variedades naturales e historia, a lo que se agrega ahora una atractiva construcción que refiere a la denominación del sitio próximo a visitar.
El Diario mantuvo una charla con el artista creador de este trabajo, uno de los tantos destacados de su trayectoria:
-¿Cómo surgió la propuesta de hacer este trabajo en la entrada a la Fundación?
Me convocó Sebastián Vidal, con él venimos trabajando y tenemos buena relación. Me dijo que querían hacer algo en la entrada a la Fundación. Ellos saben cómo es mi forma de trabajar, le busco por el lado creativo, hacer algo diferente. Por suerte me dan esa libertad, aunque obviamente hago un proyecto de lo que se me ocurre, lo presento y lo aceptan o no, ya sea por costos, gustos u otras circunstancias. Por eso quiero agradecer a todas las personas y situaciones que hicieron posible que esto se lleve a cabo y concrete.
-¿Con qué materiales trabajaste y cuánto tiempo te demandó la obra?
Son pocos, mayoritariamente es malla tejida de alambre galvanizado, hay piedras granito que se usan para el adoquín, también hierros planchuela con los que hice las letras. En el taller estuve un mes y medio casi dos, para hacer los dos gaviones en el taller, que es el modelo de hacer una malla, un cuadrado, cubo o rectángulo y llenarlo de piedras, que fueron diez mil kilos. Después unos cuatro días y medio de llenado de piedra. Y generé lo de las letras, que le dan el nombre al lugar.
-Contame detalles de la obra: las letras, medidas, el fondo, etc.
La idea mía era utilizar piedra de cantera, porque ese lugar antiguamente era una cantera, que empezó a funcionar en los años ’40, según tengo entendido. Después lo adquirió la Fundación, así empezó a ser conocido y hoy es Reserva. La idea de la piedra era también para que colabore con el entorno, que sea algo visual lindo y tenga que ver con el lugar. Y lo de las letras, que son transparentes y pasan de lado a lado al verlo, es la parte simbólica de la pureza del lugar, la transparencia de la naturaleza y más con el nombre de Reserva.
-Qué respuesta has tenido acerca de este trabajo?
Los comentarios, gracias a Dios, fueron buenos. Ha gustado el trabajo, pero la verdad que siempre tiran buena onda, con algunos comentarios te sorprendés más. Pero en general fueron buenos y como que apoyan que se sigan haciendo este tipo de acciones, no por parte mía sino de quien le toque hacerlo, que se hagan cosas lindas para que queden bien en la ciudad y haya otra cosa más para visitar. O que sea algo complementario a todo lo demás, en este caso en la Fundación no hay mucho que decir porque es un lugar hermoso que habla por sí solo. Pero también está bueno darle algo de belleza en la entrada.
-Qué próximos trabajos tenés en vista o has diagramado?
Ahora estoy haciendo algo de naturaleza en hierro, un vegetal para un privado, en la zona de Laguna La Brava, hace un mes que estoy ahí y tengo para un tiempito más. Después tengo proyectos, cuando pienso algo y lo armo, lo presento en la Municipalidad, a veces se puede hacer y sino se busca en la parte privada. Eso nunca para, en la cabeza las cosas siempre están o van apareciendo, después por ahí lo limitará la parte económica si se puede hacer o no. Hay varias cosas, no me gusta adelantar mucho porque es un proceso que quiero que vaya despacio.
-Sentís que los balcarceños valoran tu labor como artista, después de tantos y tan buenos trabajos que has hecho?
La vedad que sí, la gente re bien. A veces me preguntan qué soy, entonces el que me quiera llamar artista, herrero o escultor, que lo haga. Me tiene sin cuidado el nombre, la etiqueta. Sí mi trabajo es hacer cosas artísticas, pero me concentro en lo que me gusta hacer, el proceso es lo que más me gusta. Lo más difícil es empezar, hasta que se te ocurre algo, después llevarlo a cabo y ver los medios. Si lo podés hacer o no. Generalmente se puede, es un tema de organización y ver cómo, pero se puede. El proceso es lo más largo y lo que más disfruto, lo hago para divertirme, pasarla bien y estar a gusto conmigo con lo que hago. Porque es parte de mi avance y mi crecimiento, todos los días aprendo y eso es lo sorpredente, nunca hago un trabajo igual al otro. Eso es espectacular y te mantiene con los pies en la tierra constantemente, nunca te la podés creer en nada porque vas aprendiendo minuto a minuto. Hay un montó de cosas técnicas que hacen que el laburo sea apasionante.
-Tenés algún desafío particular en tu profesión, te gustaría hacer algún trabajo determinado o trabajar en tal lugar?
Tengo curiosidad de trabajar con otros materiales, aparte del hierro. Lo hice y lo hago, cosas chicas. Me interesa fusionar hierro con lana, hacer arte con agua, trabajar con barro. Hay materiales que me llaman la atención y me gustaría. Después hay laburos que tengo ganas de hacer, los tengo ahí hace años. Y si pudiera trabajar y vivir acá en Balcarce me encantaría, porque es la ciudad donde vivo, me crié y tengo gente que quiero. Y siempre que haya cosas para aportar y que Balcarce esté un poco más linda, me encantaría hacer. Pero siempre estoy abierto a propuestas, si vienen de otro lado y me piden hacer un trabajo, bienvenido sea también.