Encuesta

En el microcine del Museo Fangio, se llevó a cabo la presentación del libro autoría del doctor Sebastián Tobia González, titulado “José Froilán González, un ícono del automovilismo, su historia y sus autos”.

Una jornada donde se proyectaron imágenes de la trayectoria deportiva del piloto nacido en Arrecifes, su paso por las categorías nacionales e internacionales, teniendo como corolario su etapa destacada en la Fórmula 1 y su vínculo con Ferrari. Las emociones ganaron terreno, tanto en el propio escritor como en algunos espectadores al recordar determinados autos o carreras.

Familiares de quien fuera amigo, compañero de equipo o rival en pista del balcarceño cinco veces campeón del mundo de la máxima divisional del automovilismo, acompañaron esta iniciativa, que ya en diciembre había tenido un accionar similar en la sede de la Asociación Argentina de Volantes (AAV). Entre ellos se hizo presente Raúl Ordoñez, sobrino directo del homenajeado, acompañado por algunos de sus seres queridos.

CON LOS GRANDES

El primero que tomó la palabra fue Juan José Carli, en su carácter de presidente de la Fundación Museo del Automovilismo Juan Manuel Fangio, quien agradeció al autor del libro por querer presentarlo en las emblemáticas instalaciones locales.

Tras resaltar el nexo que produjo el médico balcarceño José Legato, amigo del doctor Tobia González, para que este viniera a la ciudad a mostrar su obra, contó también alguna anécdota de Froilán González en ocasión de llegarse al edificio de calles 17 y 18, en la cual su mujer oficiaba como recepcionista en un agasajo y no reconoció al visitante. “No me dejan entrar, a mí…”, le dijo Froilán al propio Carli, que por su parte destacó que lo hizo de buena manera, si querer hacer valer su nombre y esperando correctamente a que la situación se encaminase y pudiera ingresar.

“Lo dije en la presentación del libro de Bordeu y se me eriza la piel: uno a veces está tocado por la varita mágica, por compartir cosas con gente muy grande, como fueron Juan Manuel Fangio, Juan Manuel Bordeu. Froilán también era un tipo extraordinario, pude compartir muchas cenas acá en la inauguración del Museo, antes de que se hiciera y después que se inauguró, él siguió viniendo muy seguido a Balcarce. La relación que nosotros tuvimos con toda esa gente es extraordinaria, a todos los llevamos en el corazón”.

ALGO PARTICULAR

A su turno, el doctor Sebastián Tobia González, próximo a viajar a Estados Unidos por cuestiones laborales y que por lo tanto no pudo comprometer su presencia para la Fiesta del Automovilismo, tomó el micrófono y se dirigió al público presente en el microcine.

“Yo empecé tratando de conseguir, un poco de forma egoísta, ser el único en tener una réplica de los autos de Froilán González en escala 1.43. Pude conseguir algunos de colecciones que se venden al público, pero no había muchos, por lo tanto me conecté con una persona que me dijo que me las iba a hacer pero solamente a mí. Y lógicamente que esto es muy difícil de conseguir si no es con el apoyo de mi familia, que me dejaron sacar libros de los estantes para poner autitos y a partir de ahí empezar la colección”, manifestó a modo introductorio.

Fue avanzando en su presentación describiendo rasgos particulares de la personalidad del corredor, relatando vivencias del mismo, haciendo una síntesis de carreras y temporadas en las que intervino, ya sea en el país, por tierras sudamericanas o bien en Europa, acompañando sus narraciones a las imágenes que se iban proyectando de cada época.

Habló también de su etapa post piloto, en la que dedicó tiempo a la preparación de la Masseratti Chevrolet Apache, que inició en 1966 ganando las 500 Millas de Rafaela, conducida por Jorge Cupeiro. También incursionó con el recordado Chevitu en el Turismo Carretera, obteniendo el piloto antes citado una muy destacada actuación.

Hubo aplausos de reconocimiento a la labor del escritor, abrazos y saludos, intercambios de presentes y una muestra más, de alguna manera, de la amistad de Froilán González y Juan Manuel Fangio.

COMO OBSEQUIO

La obra creada por Sebastián Tobia González no se encuentra a la venta. En ocasión de la presentación, entregó a Carli un ejemplar, para ser colocado a modo de exhibición en el espacio que dentro del Museo Fangio se dedica a Froilán González.

“Estar en un lugar como este es muy emocionante para mí, tengo una enorme gratitud porque no es mi ámbito, seguramente muchos de los que están acá saben más que yo de automovilismo, Fangio y Froilán. Yo en este libro resumo una historia mía y por eso lo entrego para que quede acá”.