Coronavirus: la experiencia de un médico balcarceño en Italia
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia ante la propagación del coronavirus COVID-19. Uno de los países más afectados es Italia que registra la mayor tasa de mortalidad con algo más de mil víctimas y más de 15 mil infectados.
Para poner freno al contagio, las autoridades locales implementaron una serie de medidas en torno a la salud, como la restricción de la circulación por las calles y el aislamiento.
En el medio de esta psicosis, los argentinos que residen allí debieron cambiar sus hábitos y tomar los recaudos necesarios para no correr riesgos.
Uno de ellos es el balcarceño Cristian Guridi, cardiólogo, quien llegó a Italia en enero último para seguir adquiriendo conocimientos hasta el mes de abril, en principio, y volcarlos luego en el Instituto Médico Platense.
Está radicado en Belluno, una población de 36 mil habitantes de la región de Véneto, emplazada a unos 80 kilómetros de Venecia, aunque en la provincia existen algo más de 210 mil pobladores.
La realidad que vive allí Guridi, si bien no la minimiza, es diferente a la información que se publica aquí en torno a lo que sucede en otras regiones de Italia.
En el territorio peninsular, el gobierno liderado por Guiseppe Conte ha dispuesto el aislamiento de la población para combatir los efectos del virus. «La primer medida adoptada fue la suspensión de las clases. Si bien hay preocupación, debo decir que donde me encuentro solo se registró un caso sospechoso de coronavirus hasta el momento. Precisamente estoy haciendo mi especialización en un hospital y está funcionando en forma normal. Se ha instalado una carpa sanitaria fuera del edificio donde aquella persona con síntomas de la enfermedad o sospechada de haberla contraída, por ejemplo, es sometida a un ‘triage’ para luego continuar con su atención», relató.
Consideró luego que debido a esta pandemia hay cambios en la rutina de los habitantes. «Quizás en otras ciudades como Milán o Venecia se vive todo esto de otra manera. Pero en Belluno, donde me encuentro, más allá de las medidas adoptadas como suspensión de clases, de reuniones masivas, de cierre de fronteras y de aislamiento, por citar algunos casos, hay tranquilidad. Esto es lo que se vive por aquí por el momento», concluyó.