Reino junto a su candidato a primer concejal Francisco Ridao

La llegada triunfal de Esteban Reino al bunker de la Unión Cívica Radical fue el broche de oro de una jornada que se selló con un resultado que ni los más optimistas estimaban que podía ser tan abultado.

La algarabía que desde apenas conocidos los primeros resultados iba «in crescendo» estalló con el arribo del Intendente reelecto. Gritos, lágrimas, risas y abrazos interminables exteriorizaban una alegría hasta horas antes contenida.

Esteban Reino debió atravesar con gran esfuerzo los pocos metros que lo separaban del palco. Una barrera humana que ansiaba compartir la celebración lo encerraba.

Fueron muchos los minutos que le demandó transitar ese camino hasta que finalmente llegó el gran desborde emocional cuando en el ya tradicional acoplado devenido en palco se vieron los brazos en alto de Esteban Reino.

«Dijimos al inicio de la campaña que teníamos un equipo de fierro y lo demostró. Ese esfuerzo se hizo realidad» comenzó afirmando el Intendente para sostener que «ni el más victorioso pensaba en obtener este respaldo. Estamos muy contentos y agradecidos a todos los vecinos de Balcarce, a los que nos votaron y los que no lo hicieron».

Tras saludar «a los demás candidatos que compitieron lealmente», resaltó que «ahora nos queda a todos los balcarceños la responsabilidad de recorrer un nuevo camino. Ese camino que tiene que ser el del desarrollo y crecimiento para la ciudad», subrayando que «ahí tenemos que estar todos juntos».

«Hoy termina el acto electoral. Mañana tenemos que seguir para el que más lo necesita, para el vecino al que aún no le llegó una obra y ahí tenemos que estar todos juntos», enfatizó.

Agradeció a su equipo, a su familia y a «todos los que cada vez que salimos a recorrer un barrio nos saludaban, nos daban su respeto. Seguramente muchos de ellos no nos votan pero nos respetan y eso para nosotros no tiene precio. Y así debe ser la política bien entendida»

«El respaldo que nos han dado hoy no es un cheque en blanco es una responsabilidad mía y de cada uno de nuestros funcionarios de redoblar los esfuerzos y pagárselo a cada uno de nuestros vecinos con más obras , con mas trabajo y con honestidad», fue el compromiso de Reino, reafirmado al expresar que «para nosotros es una responsabilidad enorme Estamos muy contentos por eso y vamos a estar eternamente agradecidos por todo esto. Estas son las cosas que traen alegría en la política, seguramente otras no, pero hoy es tiempo de festejar, mañana estaremos nuevamente dedicados al trabajo como lo venimos haciendo».

«De ahora en más tenemos que trabajar más unidos que nunca. El acto electoral termina hoy, mañana somos todos vecinos, algunos con más responsabilidades que otros, pero Balcarce ha encontrado y ratificado hoy un rumbo de crecimiento; y ahí tenemos que estar todos, oficialismo y oposición. En Balcarce no tiene que haber grietas, las grietas las dejamos para otros. En Balcarce tenemos que tener proyectos y puntos de encuentros. No puede ser que nos pongamos a discutir cosas banales que no pasan por solucionarle la vida a la gente. Pongamos puntos de encuentro y vayamos a Provincia y a Nación para que le den a Balcarce lo que le corresponde. Balcarce es la ciudad más linda de la provincia de Buenos Aires, tiene todo para crecer, tenemos recursos, las mejores tierras, las mejores sierras No puede haber gente que pase necesidades Y eso es responsabilidad de todo el arco político. Nadie se puede hacer el distraído, vamos a tener que trabajar más juntos que nunca. Balcarce debe y tiene que ser la mejor ciudad de la provincia de Buenos Aires», afirmó Reino en medio de una multitud enfervorizada.

En el tramo final de su discurso dijo que «si ponemos objetivos comunes en seguridad, en salud, en servicios y en obras públicas no puede haber diferencias. Ahí vamos a estar todos juntos. Desde hoy convocamos a todas las fuerzas políticas a poner a Balcarce en el lugar que se merece. Vamos a estar eternamente agradecidos de esto que nos han dado hoy pero lo vamos a devolver con más trabajo, con más humildad, con más escuchar al otro. No tiene que haber diferencias, tiene que haber hechos concretos para desarrollar la ciudad y ahí tenemos que estar», sellando su alocución con un «¡Vamos Balcarce!» al que se sumaron todos los presentes.

Acto seguido y como cierre de los festejos, Esteban Reino a bordo de una camioneta inició una caravana que llevó el festejo a toda la ciudad.