Una situación que se generó en la mañana de ayer en pleno centro de la ciudad habría puesto al descubierto una preocupante realidad en el ámbito de la guardia de emergencia del Hospital Municipal Subzonal «Dr. Felipe A. Fossati».

Los hechos: alrededor de las 11:30 de la víspera se produjo la caída de una señora de avanzada edad, en la zona de calle 16, entre 17 y 19, a pocos metros de las oficinas locales del IOMA. La víctima fue rápidamente auxiliada por ocasionales transeúntes y uno de ellos requirió la presencia de una ambulancia del centro asistencial.

Y allí comenzó la parte que genera el relato. Pasaron unos minutos y la mujer seguía tendida en el piso con quejas de mucho dolor, lo que motivó que se acercara una oficial de la Policía que prestó contención a la señora. Los minutos pasaban y la ambulancia no llegaba. Se sumó un Policía de civil, quien también utilizando su equipo de comunicación reiteró el pedido de auxilio al Hospital. La ayuda seguía sin llegar.

Entre el desconcierto y la preocupación, alguien se dirigió hasta el Instituto ubicado en calle 17, a pocos metros de calle 14, donde se pidió colaboración y una doctora que allí estaba atendiendo en su consultorio respondió y se acercó hacia el lugar del incidente.

Finalmente, y después de casi media hora, llegó la ambulancia sin que fuera necesaria la actuación de la profesional antes referida.

Superada la situación quedó entre los presentes un dejo de preocupación e indignación por el tiempo que tardó la llegada de la ambulancia. Comenzaron a trascender los motivos que habrían generado la demora y el principal sería la falta de choferes que se hagan cargo del control de las ambulancias.

Las versiones indican que habría un solo chofer en la guardia, que al momento del llamado según lo que se escuchó en el lugar «estaba en otra emergencia» y otro estaba de guardia pasiva, en la que espera de ser requerido, en caso de que la situación lo amerite.

Sería oportuno que desde las autoridades del Hospital Municipal se informe si es esa la situación, si es algo transitorio o se viene registrando desde hace tiempo y si hay gestiones para superarla.

Poner claridad sobre esta cuestión, que en caso de ser así pone en un manto de dudas la atención de toda la comunidad ante imprevistos que pueden generarse en cualquier momento del día.

En este caso primó el sentido común de las personas que se acercaron al lugar e ignoraron el pedido de la mujer de levantarse, ya que cuando llegó la ayuda del Hospital, en primera instancia se habría comprobado que la víctima presentaba alguna lesión ósea o golpe muy fuerte en la zona de la cadera.

El Hospital contaría en su protocolo: además del llamado al chofer que se encuentra de guardia pasiva; un llamado telefónico a la Asociación de Bomberos Voluntarios para comunicarle que no pueden concurrir al pedido de una emergencia y en este caso los servidores públicos con su ambulancia acuden al lugar del accidente. Casos que no usaron en esta circunstancia, ¿quizás porque el pedido de auxilio fue por la caída de una persona que no se consideró como urgente?