La inseguridad no descansa. En esta oportunidad, una vecina de apellido Collado que reside en el sector de calle 11 entre 10 y 12 se convirtió en una víctima más del accionar delictivo luego de ser engañada por un hombre mediante la modalidad del "cuento del tío".

El hecho ocurrió durante la mañana de ayer, alrededor de las 11 y a plena luz del día, cuando la jubilada recibió un llamado a su puerta.

Antes del robo, la damnificada había recibido un llamado de alguien que se hizo pasar por su hijo. Esta persona le dijo que iba a enviar a alguien de confianza a recoger dinero para cambiar en el banco.

Quien se presentó en su domicilio era un hombre que le aseguraba que los billetes viejos iban a ser sacados de circulación y que era necesario cambiarlos por los nuevos.

Mediante el relato de esta historia el delincuente fue convenciendo a la víctima poco a poco hasta que logró su cometido de engañarla por completo.

Una vez que la mujer accedió a darle el dinero, el hombre se retiró del lugar con una importante suma de dinero.

Al cabo de unos minutos, la mujer se percató del engaño y dio rápido aviso a la Estación de Policía Comunal.

La jubilada, quien afortunadamente no recibió golpes ni amenazas en ningún momento por parte del ladrón, radicó la correspondiente denuncia en la Comisaría.

Los efectivos se hicieron presentes en la vivienda de la damnificada y en este momento se encuentran investigando el hecho para intentar esclarecer la situación y hallar al autor del robo.

Otra familia fue víctima del "cuento del tío"

La familia Ávila, al igual que Leila Collado, fue víctima del "cuento del tío" y sufrió también el robo de una importante suma de dinero en su vivienda de calle 12 entre 27 y 29.

Los damnificados fueron engañados y al igual que en el anterior caso, los delincuentes realizaron un trabajo de inteligencia previo.

La familia Ávila radicó la correspondiente denuncia en la Estación de Policía Comunal, la cual se encuentra investigando el hecho para intentar dar con los autores.

CUATRO ROBOS EN CUATRO DÍAS

Desde el asalto que sufriera la jubilada de apellido Cambareri el pasado viernes por la noche hasta este último hecho pasaron poco más de 80 horas.

Con diferentes hechos, pero con similares engaños y modus operandi, la ola delictiva en la ciudad continúa a pesar de los esfuerzos de las fuerzas de seguridad.