«Estamos cumpliendo el rol del Estado», afirmó Mario Luna

Una de las áreas municipales que ha cobrado notoriedad por la gran cantidad de procedimientos que viene llevando adelante es la Dirección de Inspección General.

Una serie de inspecciones, apercibimientos y clausuras realizados desde el comienzo de la gestión han generado una fuerte repercusión, oyéndose voces aprobatorias de parte de aquellos que ven de buen grado que se procure regular como corresponde a las actividades comerciales así como fuertes críticas de quienes no están de acuerdo con las acciones que se llevan adelante.

El titular del área, Mario Luna, pasó a ser para algunos el "malo de la película" mientras que otros lo encasillan como "el justiciero".

Lejos de cada uno de esos calificativos sostiene que lo único que hace es cumplir con el trabajo encomendado que es nada más y nada menos que poner orden donde hasta hace poco no lo había., aunque sostuvo que no le gusta "estar mirando para atrás". "Yo necesito marcar el punto de partida tanto en lo administrativo como el trabajo de calle y analizar los resultados", afirmó.

"Cuando asumí planteé que estaba acreditando la falta de presencia del estado municipal en todos su rubros. En Inspección General área de la que hoy tengo la responsabilidad de estar a cargo había un estado de anarquía y descontrol mucho mayor de lo que se podía imaginar y lo vamos palpando día a día en la medida en que vamos trabajando en la calle", explicó para entrar en tema, sosteniendo que su principal objetivo es revertir esa situación.

Con escaso personal y menos elementos de los indispensables, la tarea no es fácil de llevar adelante, pero cuenta con el aporte de la comunidad que informa sobre múltiples irregularidades que van desde el mal uso del agua a la venta de alcohol en lugares y horarios no permitidos, atravesando todos los ítems imaginables.

MAYOR PRESENCIA

"Lo que se está teniendo es mayor presencia en la calle o con una mirada más exhaustiva" afirmó señalando que a la vez se están realizando reuniones orientativas junto a la Cámara de Comercio para asesorar a los comerciantes sobre muchos aspectos de la compra, venta y manipulación en especial de productos alimenticios.

Como se dice habitualmente "el que avisa no traiciona" y precisamente haciendo alusión a dicha frase Luna informa, asesora y luego de un tiempo prudencial comienza, con su gente, la tarea de control y sanción en caso de que no se cumpla con las disposiciones vigentes.

El titular de Inspección General sostiene que no es difícil revertir toda la permisividad existente hasta no hace mucho tiempo y si bien reconoce que suele haber algunos casos de reacción negativa "cuando a la gente se le explican los motivos por los cuales se los sanciona lo aceptan".

En ese sentido dijo que se están haciendo los apercibimientos cuando corresponde, dando un plazo determinado para que se regularice la situación y en caso de no cumplir se avanza en lo que hace a la sanción o clausura.

Por otra parte sostuvo que cuando la gente ve que la ley es pareja para todo el mundo muestra satisfacción. "Lo primero que dicen es "bueno yo regularizo pero que lo haga el resto también", y es lo que estamos tratando de hacer" señaló.

CLAUSURAS

En cuanto a las clausuras que se han realizado explicó que "salvo dos situaciones puntuales, fueron comercios que previamente habían sido debidamente inspeccionados, emplazados, nuevamente inspeccionados y notificados. Los tiempos estaban agotados y con caso omiso de parte del contribuyente .Las instancias en las que se llegó a las clausuras se dieron tras todo su proceso previo y una vez excedidos todos los plazos otorgados".

En cuanto a los pasos previos al cierre, manifestó que antes "se hacía una inspección se notificaba al infractor, se le daba un determinado plazo pero no se volvía a ver si había regularizado su situación, por lo que el infractor veía que no pasaba nada y seguía todo igual. Ahora se emplaza al infractor y se regresa en la fecha acordad para ver si cumplió con lo que le corresponde"

REMISES

Uno de los tópicos problemáticos es, desde hace mucho, el de los remises, con muchas promesas de regularización que nunca llegaron a ser cumplidas. Al respecto Luna dijo que "se está trabajando. Estamos cambiando el sistema de controles, que se van a hacer por agencias. Las unidades deberán presentarse en inspección pero las agencias van a tener un día determinado para concurrir y la fiscalización se hará en doble turno".

La intención es ir "aceitando todos los engranajes" para poder avanzar, aunque, remarcó, deben enfrentar la limitación de la falta de recursos humanos, lo que acota mucho los horarios de trabajo.

"Es un compromiso conmigo mismo el poder regularizar esto de los remises porque lo vengo trabajando desde marzo del año pasado" añadió aún sabiendo que la tarea no será fácil. En ese aspecto ejemplificó que "en diciembre de 230 unidades se presentó al control tan solo un 10 % cuando tienen la obligación de presentarse todos mensualmente".

MINORIDAD Y NOCTURNIDAD

Estas áreas no son de neta incumbencia de Inspección General pero también le competen. "Es la Dirección de Movilidad y Control Urbano (antes Tránsito y Nocturnidad) la que tiene más ingerencia, pero tenemos actividades compartidas" señaló manifestando que en muchos casos "hay cosas que desde las familias se están consintiendo. Los menores están en la calle con permiso de sus padres".

Este tema, dijo, fue abordado en una reunión de la que participó días atrás en la ciudad de La Plata para interiorizarse sobre detalles de la ley del REBA "porque había procedimientos que acá desde que está la ley nunca se utilizaron y sobre metodología de determinado tipo de eventos en los que podríamos estar en contramano con otros lugares de la zona".

Luna sostiene que el tema de la permisividad en torno a los menores, la noche y el consumo de alcohol "merece un amplio debate en la sociedad, decir qué es lo que queremos ya que cuando tenemos un inconveniente trasladamos la responsabilidad al gobierno como si fuera el "papá" mayor pero desde nuestro lugar no hacemos lo que tenemos que hacer. Es todo cuestión de sentido común. Pero que el Estado tiene que cumplir su rol, seguro.

Al consultarle si se puede lograr un equilibrio y organizar todos esos aspectos como para que se pueda vivir en una ciudad "ordenada", Luna respondió que "la consigna principal de la gestión según se dijo en todo momento es que se venía a poner orden y estamos trabajando en eso. Estamos poniendo orden y haciendo gestión, tratando de encontrar soluciones a problemas históricos que gracias a Dios tenemos el orgullo de que lo estamos haciendo. Estamos haciendo gestión cuando hacemos controles cuidando la salud de la comunidad. Nuestra presencia no obedece a la intención de hacer daño como algunos pueden interpretar o decir en forma maliciosa: Estamos cumpliendo el rol del Estado. Nuestro rol es inspeccionar, nuestra función es controlar que los elementos que estén a la venta estén en las condiciones que deben estar. Nosotros estamos para chequear que eso se cumpla. Es nuestra función. Y en lo que hace a la venta de alcohol hemos ido a lugares que el común del vecino sabía que se vendía, se procedió a la clausura, al decomiso si correspondía. Sabemos que es difícil cumplir con las expectativas de la gente, pero estamos avanzando con la intención de ser justos y equitativos, afirmó.