"Al área de Desarrollo Social no hay que descuidarla porque es muy sensible"
Cuando fue convocado para ser parte de la actual gestión de Gobierno municipal a partir del 10 de diciembre del 2015, el profesor Luis Vildoza, quien acababa de finalizar su mandato como concejal, aceptó pero lo hizo con una condición que se la transmitió al intendente Esteban Reino: estaría al frente de la Secretaría de Desarrollo Social solo por algunos meses.
Esa decisión obedecía a la necesidad de Vildoza de dedicarle más tiempo a su familia, dividida entre su Catamarca natal y nuestra ciudad. Pero íntimamente sabía del desafío que tenía Reino con la comunidad y decidió estar al lado de él en esta etapa.
Hasta el próximo miércoles 7 de diciembre Vildoza se desempeñará como secretario ya que presentó su renuncia al cargo al jefe comunal. "Esto estaba pensado desde el arranque. Le dije (a Reino) que lo acompañaría un tiempo, y ese tiempo ya está concluyendo. Después de un año me alejo del cargo", dijo confirmando lo adelantado por
El Diario en su edición del sábado. En su lugar, aunque no existe confirmación oficial aún, iría la actual coordinadora de los Centros Integradores Comunitarios (CICs), Natalia Viera. En tanto, el lugar que deja vacante lo cubriría la actual concejal de Cambiemos, Marina Albani, quien a su vez dejaría su banca a Luis Felices, primer suplente de la lista que compitió el año anterior en las legislativas.
Durante estos casi doce meses de gestión, reconoció Vildoza que "tuvimos que reordenar la secretaría y pensar en darle una mirada distinta en función de nuestras posibilidades y de los recursos disponibles. Fue mucho trabajo el que se hizo y se hace para reacomodar una serie de situaciones".
Con la simpleza que lo caracteriza para expresarse, Vildoza está convencido que "ahora son los jóvenes los que tienen que continuar con esta tarea. El empuje inicial está dado. Y estoy convencido que a futuro se lograrán cosas más importantes a partir del ordenamiento en lo económico que están logrando Nación, Provincia y Municipio.
Mientras transita sus últimos días como secretario, Vildoza está dispuesto a volcar toda su energía en la familia. "Mi etapa como funcionario se cumplió. Ejercí muchos años la docencia, luego fue concejal durante cuatro años y seguidamente me sumé al grupo de trabajo del jefe comunal", expresó a manera de resumen.
- ¿Cómo tomó el Intendente la decisión de retirarse de la función pública?
- El hubiera querido que siguiera un tiempo más en el cargo pero en mi mente ya estaba decidido que tenía que terminar en estos tiempos. La transición debe ser normal. En el equipo de trabajo que se ha creado, todos saben como se trabaja.
- Es un área sensible y de mucha demanda en forma constante.
- Así es. Las cosas que sucedieron por ahí ni las esperaba personalmente. Dentro del juego político hay cosas que ocurren. Y cuando es así, hay que salir y resolverlas de la mejor manera, como se hizo en estos casos. Al área de Desarrollo Social no hay que descuidarla porque es muy sensible, de muchas necesidades, ingrata para mucha gente que no puede resolver su situación y a la cual hay que asistirla. Y dentro de esa dinámica de asistir y resolver cosas, hay cuestiones a las que aún no pudimos darle solución. Por ejemplo, la entrega de tierras para la construcción de viviendas. Pero debe quedar el compromiso de seguir trabajando para dar solución a las distintas problemáticas.
UN MOMENTO DE BRONCA
Un momento difícil como inesperado que le tocó enfrentar a Vildoza como funcionario fue cuando a través de Radio del Plata el cura párroco de San José, Pablo Bosisio, afirmó que "la realidad es que la política social del Gobierno del distrito fue retirar ayuda a los más necesitados". Consideró en este sentido que es necesario que se trabaje en forma mancomunada para salir adelante.
Es un convencido de que "debe tratar de desterrarse ese concepto que no es bueno y que dice que solo el Estado, tomado como gobierno, debe resolver las cosas. Hay entidades, empresas y movimientos sociales que deben integrarse y comprometerse también, como lo hacemos nosotros. Por ejemplo, pretender que la educación formal le resuelve los problemas a la escuela, no está bien. También deben contribuir otras instituciones. Debe existir un compromiso reciproco. Para ello es necesario que todos nos involucremos».