Un paseo «histórico», recorriendo circuitos de 2.200 millones de años en Balcarce»
Un trabajo en conjunto realizado por el Instituto de Geología de Costas y del Cuaternario de la Universidad Nacional de Mar del Plata y el Municipio de Balcarce se verá concretado hoy cuando se realice a un recorrido un circuito geológico que llevará a los participantes a «pasear» por 2.200 millones de años a pocos metros del centro de la ciudad.
El contenido del proyecto para crear un parque geológico urbano y la recuperación de pasivos ambientales mineros en el distrito fue presentado a principios de febrero de este año por el intendente Esteban Reino; el asesor legal de la comuna, César Romera; el titular de Obras y Servicios Públicos, Carlos Katz, y el autor de la iniciativa, Julio Luis del Río, decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de Mar del Plata, con quien colaboraron además, Gustavo Adolfo Martínez, Karen Halpern, Emilia Bocanegra, Virginia Bernasconi y Mariana Camino.
EL PROYECTO
Según se indicó en esa oportunidad, «en los últimos años, se observa una demanda creciente del público en general de la valoración del paisaje que se contempla y para satisfacer dicha necesidad se plantearon proyectos de investigación y extensión universitaria que permiten caracterizar y difundir la valoración de áreas de interés científico, cultural e histórico del sudeste de la Provincia», proponiendo en este caso un geocircuito integrado al ejido urbano de la ciudad de Balcarce con el apoyo y participación de las autoridades locales, puntualizando que el mismo cuenta con cuatro geositios, «aptos para llevar a cabo múltiples actividades, interconectados por senderos y caminos cuya traza es aproximadamente de 7,5 km y pueden recorrerse a pie, en bicicleta o a caballo» e indicando que dicho circuito tiene un ordenamiento temporal geológico: iniciando en el Precámbrico y finalizando en el Cenozoico.
Tras explicar que dos geositios, «corresponden a pasivos ambientales en rehabilitación (canteras municipales inactivas) y dos restantes son relevantes por sus características geológicas y paleontológicas», remarcaron que este circuito «ofrece la síntesis de la historia geológica de la región y permite conocer el lugar desde una perspectiva mucho más amplia que la mera contemplación del paisaje».
«Esta propuesta apunta a la puesta en valor del patrimonio geológico, paleontológico y ambiental, entre otros, y constituye una herramienta para fortalecer la identidad cultural ciudadana», amplía el proyecto.
UN CIRCUITO PARA ADENTRARSE EN LA HISTORIA
El circuito geológico pretende constituir un elemento fundacional para alcanzar posteriormente la figura de Geoparque, la cual contempla un escenario más amplio para el sector ubicado en el flanco oriental del Sistema de Tandilia, previéndose la articulación con otros parques geológicos de distritos vecinos.
«Los geositios propuestos corresponden a parques urbanos y canteras abandonadas en rehabilitación que han quedado dentro del ejido urbano; ambos constituyen ámbitos de interés para realizar actividades educativas, deportivas, culturales e incorporar la historia geológica local» añade el informe explicando que «se denomina geocircuito urbano a un sendero que recorre un trayecto desde el centro urbano hasta su periferia» y que «cada geositio o sitio de interés geológico es un espacio que proporciona información básica para conocer la evolución de la Tierra y de la vida in situ; este término emerge al socializar el conocimiento del lugar para luego formar parte del Patrimonio Cultural (en este caso Geológico) de una región. En este caso comprende al conjunto de recursos naturales de valor científico, cultural, educativo, deportivo y recreativo, que incorpora el conocimiento de las formaciones y estructuras geológicas, geomorfología, litología, mineralogía, paleontología, edafología y entre otras disciplinas que permiten interpretar la historia geológica de la ciudad de Balcarce.
RESULTADOS
Tras los estudios realizados, se establecieron en el ámbito urbano y periurbano de la ciudad cuatro geositios para reconstruir la historia geológica local a través de «un sendero de dificultad baja, que se puede realizar a pie, en bicicleta e inclusive a caballo». El geocircuito se extiende aproximadamente 7,5 kilómetros y, si bien se puede iniciar por cualquiera de sus puntos, se recomienda seguir la línea del tiempo geológico según el siguiente detalle y orden:
Geositio 1: Complejo Buenos Aires.
Cerro «El Triunfo». Se accede desde la avenida Cereijo, donde se observan los frentes de explotación de la antigua cantera de granito. Este sitio posee rocas de edad Neoproterozoico.
Geositio 2: Contacto Precámbrico/Paleozoico Inferior
Autódromo «Juan Manuel Fangio». En el faldeo norte de la Sierra «La Barrosa» se extiende un camino a media ladera donde es posible observar la inconformidad estratigráfica determinada por el contacto entre el Complejo Buenos Aires y la Formación Balcarce.
En este geositio donde el visitante podrá ver e interpretar un lapso importante de la historia geológica regional, que pone en evidencia como el mar paleozoico transgredió sobre antiguas rocas cristalinas.
Geositio 3: Formación Balcarce.
«Sierra La Barrosa/ La Mordida del Diablo». El sitio permite observar las ortocuarcitas, niveles conglomerádicos y pelíticos que constituyen la Formación Balcarce. Además, la abundante icnofauna hallada en las prospecciones preliminares de la sierra «La Barrosa», lo convierte en un sitio de interés dónde se resguarde in situ el patrimonio paleontológico.
La importancia científica y educativa de este sitio radica en que los equivalentes estratigráficos de dicha formación se encuentran en la zona del Cabo, en Sudáfrica, en la parte superior del Grupo Table Mountain (Cingolani 2011), demostrando la conexión entre ambos continentes
Geositio 4. Cenozoico
La Tosquera. Al pie de la Sierra La Barrosa, afloran las limolitas y paleosuelos loésicos de edad neógena representados por las formaciones Barker y Vela, ambas en contacto discordante. Los depósitos culminan con un nivel calcáreo (tosca) de extensión regional, denominada Paleosuperficie Tandil.
Este geositio está situado en una cantera de tosca abandonada por lo cual representa un pasivo ambiental que a partir de su puesta en valor se convierte en un activo cultural y educativo. Este sitio podrá complementarse con actividades deportivas con la refuncionalización de las pistas de laboreo en forma de bicisenda y circuito de bicicrós; otro sector parquizado para merenderos y asadores, entre otras.
Manual y exposición de material geológico y paleontológico
La paleontóloga y doctora en Ciencias Geológicas, Karen Halpern comentó que dentro del proyecto se está trabajando en la confección de un manual sobre este geocircuito que será presentado en el año próximo, que se convierta en una herramienta para el turismo local y se pueda trabajar en las escuelas.
La intención es, además avanzar en la consolidación de un proyecto nuevo que se extenderá durante 2019 y 2020 «para seguir trabajando, seguir elaborando material didáctico, seguir haciendo recorridos y que se empiece a conocer en profundidad todo lo que hay.
En ese sentido ya se están confeccionando paneles explicativos que se colocarán en cada uno de los puntos estratégicos del circuito para que se pueda leer al momento de realizar el recorrido que quedaría habilitado a principios del próximo año.
Por otra parte, se sumará también como parte del atractivo educativo y turístico la exposición del material geológico y paleontológico de la zona reunido durante años por el vecino Oscar Martín y cedido ahora al Municipio, el que será, adelantó, expuesto a partir del año próximo en el hall central del Palacio Municipal.
Según se indicó, ya se ha seleccionado el material y en principio se van a armar dos vitrinas con banners acompañando el material mientras se está tramitando para que el mismo figure como perteneciente a la Municipalidad, requisito indispensable por cuestiones legales para poder ser exhibido.