Octavio y Victoria no bajan los brazos en su lucha para reencontrarse con "Titi"

Mañana, Octavio Vignolio y Victoria Balda, padres del "corazón" de "Titi", solicitarán al juez en lo Civil y Comercial número 4 del Departamento Judicial de Dolores, Marcos Val, el correspondiente permiso para poder visitar a la criatura que está al cuidado de una familia de General Guido desde hace casi dos años por determinación de la jueza Verónica Polchowski, titular del juzgado de Familia Nº 1 de Dolores, quien debió luego dar un paso al costado el año pasado al prosperar el juicio político sobre su persona.

Para cumplimentar dicho requerimiento, Octavio y Victoria aguardaron a que finalizara el período de restricción de acercamiento hacia el pequeño y también a la familia que lo está cuidando, lo cual sucedió ayer. Es que además, el nuevo juez en la causa les manifestó en forma personal que no extendería la misma.

Fue en el mes de abril de 2014 que el matrimonio balcarceño recibió para su cuidado a "Titi". Un año después debieron restituirlo por decisión de la Justicia tras haberle dado afecto, contención, cuidado y amor, determinando la jueza Polchowski que fuera entregado en "guarda para adopción" a un matrimonio de la localidad de General Guido, donde se encuentra actualmente.

El caso, por sus características, tomó enorme trascendencia en los medios locales, regionales y nacionales, más aún a partir de que Octavio decidiera unir corriendo, por etapas, nuestra ciudad con General Guido para completar 150 kilómetros para reclamar por la tenencia de su "hijo del corazón", y de que Victoria compartiera uno de los almuerzos de Mirtha Legrand por la pantalla de El Trece.

UN LARGO CALVARIO

Comenzó entonces para Victoria y Octavio un largo calvario en abril de 2015. Pero ahora se abre una luz de esperanza a partir de tomar el caso el juez Val, quien los convocó a ambos en forma inmediata, tal cual adelantó El Diario en su edición del sábado 4 de febrero.

En ese encuentro, el matrimonio balcarceño se interiorizó sobre el estado de la causa. "La charla fue muy positiva. Resaltamos el hecho de que nos citara para conversar y mostrarnos los expedientes, que estaban reservados sin ninguna necesidad. No había argumento para las restricciones de acercamiento que veníamos teniendo hacia 'Titi' y el matrimonio que lo cuida. Por eso el juez nos dijo que no renovaría la extensión de una medida que vence hoy (por ayer). Es por eso que el lunes elevaremos una nota al Juzgado solicitando permiso para poder visitar a la criatura. Estamos realmente muy esperanzados. Esto demuestra la connivencia que existía antes entre las partes", contó Octavio, valorando el accionar del juez Val.

- ¿Qué saben de "Titi" hoy?

- Victoria. Hay vecinos de General Guido que nos cuentan que él está grande. Hace 22 meses que no tenemos contacto personal. A través de fotografías que nos han acercado, vemos que sigue teniendo mucha tristeza en su mirada. Pero tenemos mucha confianza y fe en el momento en que nos reencontremos. Cuando nos miremos, los recuerdos y el amor sincero construido volverán a surgir naturalmente. Quiero verlo sonreír. Insisto, no lo vemos feliz a través de las fotos.

- Por lo que señalan, ¿tienen plena confianza en el juez Val para que puedan reencontrarse con "Titi" y recuperar además la tenencia?

- Octavio. Es verdad. Pero insistimos en que no hicimos ni haremos nada sin autorización del juez y en contra del bienestar de "Titi". Lo inmediato es la presentación este lunes pidiendo poder ver al niño y contarle que nunca lo abandonamos. Cuando por decisión de la jueza (Polchowski) lo dejamos en Dolores, tenía 28 meses. Nunca le pudimos explicar lo que estaba pasando. El seguramente tiene preguntas para hacernos. Durante mucho tiempo pidió por sus papás. Estamos ansiosos que llegue el día en que podamos reencontrarnos y que pueda reconstruir en su cabeza la verdad. Ha vivido todo este tiempo en una mentira. Hace poco nos enteramos a través del expediente de un hecho grave que la abuela biológica denunció. El matrimonio de General Guido hace un par de meses llevó al pequeño a ver a su abuela biológica a Villa Gesell, donde reside. Se la presentaron a ella y a una tía como docentes del jardín. Queda claro que se le está negando el derecho a la identidad. Por eso digo que ha vivido en una mentira. Queremos decirle la verdad a "Titi" y por eso necesitamos visitarlo. Es importante para nosotros y más aún para él.

- Victoria. La gente no se olvida de "Titi" y eso nos da muchas fuerzas para seguir luchando. No es un capricho. Queremos Justicia por Titi. No bajaremos los brazos en esta lucha. Estamos esperanzados en que pronto toda esta historia va a terminar de la mejor manera.