Poco más de 60 milímetros, en diferentes momentos de la jornada y con diferente intensidad, cayeron ayer en las zonas urbana y rural. Para el sector agropecuario resultó un alivio luego de las prolongadas jornadas de intenso calor. Los cultivos estaban sufriendo los efectos de la seca.

Poco después de las 5 de ayer comenzó a llover, por momentos de manera torrencial. A media mañana, y acompañada por una tormenta eléctrica, fueron requeridos los servicios de los bomberos voluntarios debido a anegamientos ocasionados por taponamientos de canaletas.

Dos unidades a cargo del oficial auxiliar Walter Frechero trabajaron en viviendas de calle 18 número 1123; avenida Centenario y 22; en calle 14 entre 25 y 27, y en 24 esquina 35.

Asimismo, desde hora muy temprana acordaron acciones en conjunto los propios Bomberos, Defensa Civil a través de su coordinador Guillermo Canto y la Municipalidad local desde las áreas de Gobierno y Obras Públicas.