Miguel Angel Castaño, ganador en su categoría en la distancia mayor

Con la participación de nueve balcarceños entre las distintas distancias existentes, se cumplió en la sureña San Martín de los Andes la Patagonia Run 2024, carrera emblemática en su modalidad. El esfuerzo extremo le trajo su premio a todos los que pudieron atravesar la línea de llegada, que sin dudas es el primer éxito para todos los que intervienen, mientras que dos de los exponentes de la delegación local sobresalieron por sus performances: Miguel Angel Castaño ganó en su categoría y José Catalán fue octavo en su divisional y vigésimo sexto en la General, ambos en la competencia de mayor recorrido.

A su accionar se agregan las labores desempeñadas por Lucas Dimattía, Martín Carballo, Ariel Landolfi, Marcelo Desimone, Antonio Dojas, María Sabrina Viglione y Belén Reynoso.

Tomaron parte de la competencia representantes de Argentina, España, Inglaterra, Bolivia, Chile, Brasil, Canadá, Guatemala, Estados Unidos, Colombia, Uruguay, Alemania, Italia, Panamá, Paraguay, Australia, Perú, México y Francia.

UNO POR UNO

Los resultados para los competidores locales fueron los siguientes:

-100M (160 kilómetros): José Catalán, 26º en la General y 8º en categoría 40 a 49 años, con 27h18’38"; Lucas Dimattía, 122º en la General y 55º en categoría 40 a 49 años, con 35h29’46" y Miguel Angel Castaño, 179º en la General y 1º en categoría 60 a 69 años, con 39h50’4".

-110K: Martín Carballo, 109º en la General y 39º en categoría 40 a 49 años, con 22h3’48"; Ariel Landolfi, 110º en la General y 40º en categoría 40 a 49 años, con 22h3’50" y Marcelo Desimone, 111º en la General y 41º en categoría 40 a 49 años, con 22h3’ 52".

-70K: Antonio Dojas, animador de la categoría 40 a 49 años, abandonó en un tramo de la prueba.

-42K: María Sabrina Viglione, 606ª en la General y 82ª en categoría 40 a 49 años, con 7h41’46".

-21K: Belén Reynoso, 400ª en la General y 35ª en categoría 40 a 49 años, con 3h29’20".

CASTAÑO: "cUANDO LLEGÁS Y CRUZÁS EL ARCO, TE OLVIDÁS DE TODO"

«Uno está en la montaña continuamente, tratando de sortear todos los inconvenientes que van surgiendo. Esta vez el clima estuvo lindo, si bien en la noche hubo momentos de frío pero no muy intenso, no hubo heladas».

Así comenzó el relato de su carrera Miguel Angel Castaño, el representante de Balcarce que logró la victoria en la categoría 60 a 69 años. Tras casi 40 horas cumplió el objetivo y se alzó con un gran triunfo.

Hizo las cuatro cumbres que la prueba posee: la del Chapelco, la del Cerro Colorado, la del Quilanlahue y la del Centinela en ese orden, con una altimetría de aproximadamente 7.900 metros en total, lo que significa subir casi 8 kilómetros de los 162 que tuvo la carrera.

«Van surgiendo problemas que uno los tiene que ir resolviendo, como descomposturas, calambres, ampollas y demás. Yo gracias a Dios no sufrí mucho ese tipo de consecuencias, con el entrenamiento duro que había hecho (durante 3 meses) estuve bastante acorde a la exigencia que tenía», contó.

POR MOMENTOS

Castaño dio a conocer que durante la carrera fue compartiendo momentos con otras personas, en muchas ocasiones estuvo solo, también por la noche.

«Nosotros en la categoría de 60 a 69 años manejamos ritmos que a veces hacen que vayamos quedando mucho tiempo solos, que por un lado es lindo pero por otro se hace pesado. Pero fui superando etapa tras etapa, hubo unos quince puestos de asistencia  donde recargás agua y tenés cosas para comer, también otros cuatro puestos donde uno deja ropa para cambiarse y algo para comer, porque no se puede llevar en la mochila todo lo que necesitás».

Pasada la primera noche apareció el amanecer y ya la situación cambió, la sensación fue distinta y la luz natural le provocó más ganas de seguir corriendo y avanzando. «Ya en la segunda noche fue más difícil porque el cansancio aprieta mucho más, pero logré superarlo, recuerdo que la última cumbre la hice de noche tanto la subida como la bajada. Después llegás al anteúltimo puesto y sabés que te quedan 20 kilómetros hasta la meta, ahí uno se relaja y bajás un poco el ritmo también porque tenés 140 kilómetros encima y una noche y media de falta de sueño. Llegué antes  de las 7 después de 39 horas 50 minutos con 48 horas de haberme levantado y no dormir», resaltó.

EN LA META

El sentimiento que se refleja cuando un competidor llega a la meta lo graficó Miguel Castaño cerrando así un círculo iniciado con el primer entrenamiento.

«El agotamiento físico se nota, pero cuando llegás y cruzás el arco te olvidás de todo, estás re contra feliz y no te duele nada».