Fueron 89 días vividos con mucha angustia, incertidumbre, dolor pero también con mucha fe. Precisamente esto último, la fe, fue lo que le sobró a la familia Alessio en estos casi tres meses. La propia pero también aquella que llegaba a través de cadenas de oración y mensajes con buenas vibras.

El pasado 19 de abril, Francisco, quien acompañaba a su padre mientras revisaba una canaleta del techo de la Escuela Primaria N° 9, pisó una chapa de fibrocemento y cayó desde una altura de 3 metros, impactando duramente con su cabeza contra el suelo. Fue intervenido de urgencia en el Hospital local aquella misma noche, evolucionó y el 19 de mayo fue trasladado al Instituto Fleni para continuar con su rehabilitación.

Francisco, en forma lenta pero segura, fue evolucionando y eso le permitió que los profesionales que lo atendieron le permitieran dar un gran paso: volver a casa.

En el atardecer de ayer, familiares, compañeros de escuela y amigos recibieron a Francisco en el cruce de las rutas 226 y 55. Fue conmovedor lo vivido allí como también los minutos posteriores con una nutrida caravana de bienvenida que se detuvo frente al Colegio Santa Rosa de Lima, donde lo recibían una bandera con la inscripción "Bienvenido Fran" y globos. Compartió esa emoción junto a su padre José y su mamá Adriana, quienes no tuvieron más que palabras de agradecimiento por el acompañamiento y el aguante en todo este tiempo.

El rostro de "Fran" lo decía todo. Una sonrisa ilumina ahora su rostro, esa misma que hoy ¡vale la vida misma!