"No pueden dejarme morir y que muera mi hijo"
Una conocida vecina de nuestra ciudad, junto a su esposo, vienen atravesando una delicada situación derivada de la afección siquiátrica que padece su hijo, a quien ya no pueden contener al agravarse su cuadro, lo que inclusive lo ha llevado a agredirlos físicamente, causándole a su madre lesiones que motivaron su internación en el Hospital Municipal Subzonal.
Abrumada por la situación y sin poder encontrar caminos de solución a esta problemática, Marta Cabrera, una conocida vecina estrechamente relacionada a acciones vinculadas con la discapacidad, decidió salir a los medios para contar lo que está pasando junto a su esposo, Jorge Martínez, a consecuencia de haberse agravado la condición de salud de su hijo Marcos.
Desde la habitación del centro asistencial donde fue asistida para reponerse de las lesiones que sufrió en un incidente con su hijo, Marta comentó que "es una situación compleja y el salir a los medios fue la última instancia que busqué para pedirle a la comunidad que me ayude, como siempre lo hicieron".
Comentó que en el Hospital ya no saben cómo manejar la situación de Marcos ya que no hay contención psiquiátrica. Respecto a la salud de su hijo, dijo que "tiene una patología de lesion cerebral pero ahora se le ha desencadenado una patología psicótica, entonces pierde la noción y me terminó golpeando, cuando sé que me ama con toda su alma".
GRAVE DENUNCIA
En su relato también criticó con firmeza el tratamiento que Marcos recibió en el Hospital Neuropsiquiátrico "Dr. Domingo Taraborelli" de Necochea, donde había sido derivado cuando se desencadenó esta situación que lo afecta actualmente. Todo se agravó cuando fue derivado a Necochea. Ese neuropsiquiátrico es una vergüenza, lo digo porque lo vi. Marcos estuvo internado una semana. Yo iba a la mañana y a la tarde y lo que pasó fue terrible. Hablé con la directora y le pedí por favor que manejara lo que estaba pasando. Marcos estaba lleno de mugre, de la cabeza a los pies. No le dieron medicación, no se la cambiaron, sólo lo golpearon, lo ataron y lo mantenían encerrado en una habitación".
UNA SOLUCION URGENTE
Pero más allá de esos episodios, Marta Cabrera volvió a poner su energía en la búsqueda de una solución. "Acá en el Hospital los médicos me están ayudando para contenerme y ya me dieron el alta".
Agregó que "los psiquiatras que lo atiendan tienen que estar en la especialidad, no lo puede atender cualquier psiquiatra porque hay que manejar la medicación porque además es epiléptico. Hay que equilibrarlo, por eso es que estoy pidiendo a un médico de Mar del Plata, que me lleven pero cuando me preguntan qué mutual tengo les digo IOMA y no te quieren atender porque los médicos no cobran, los sanatorios no cobran, los hospitales no cobran".
Aclaró que para estar en los medios "les pedí autorización a los médicos porque ellos están gestionando a la par mía, me están ayudando. Pero salí a hablar para que no me dejen morir y no dejen morir a mi hijo. Hace una semana que no me puedo mover, es una dependencia permanente, así no puedo seguir viviendo. Quiero que alguien me diga dónde puedo llevarlo para que lo contengan, lo equilibren psiquiátricamente y después vemos como lo manejamos. El está viendo lo que pasa, percibe todo y me pide que no lo llevemos a Necochea de nuevo, se pone muy nervioso".
Habrá que esperar que aparezca alguna solución para que Marcos tenga la contención y atención especializada que merece y que sus padres puedan seguir a su lado, sin el temor de que ese hijo que tanto los ama se convierta en un agresor producto de la patología que lo afecta.