La increíble historia detrás de un violento robo que terminó con dos condenados

Los autores del violento robo a la familia Vismara fueron condenados a 4 años y 6 meses de prisión efectiva
El 23 de febrero de 2018, Haydeé Rojas y su esposo Héctor "Pirolo" Vismara (q.e .p.d.) se encontraban descansando en su vivienda de calle 15 entre 24 y 26. Un fuerte golpe proveniente desde la cocina alertó a la mujer que no tuvo tiempo para nada. Dos delincuentes la abordaron, la tomaron de ambos brazos y la arrastraron hasta la habitación donde la inmovilizaron con ataduras y posteriormente les robaron alianzas de oro, cadenas y dinero, entre otros objetos de valor. Ambos sujetos poco después fueron detenidos por la Policía.
Facundo Juárez y Pablo Solá, los autores del hecho, llegaron a un acuerdo de juicio abreviado y recibieron condenas. Juárez, una pena de 4 años y 6 meses de prisión que se le unificó por otra anterior en 10 años, los cuales deberá purgar sin posibilidad de un régimen condicional. En tanto Sola cumplirá 4 años y 6 meses de prisión.
"Parece una pena módica pero hubo algunas circunstancias que la hacen trascendente, como el hecho de que no hayan usado armas y que deban cumplirla en su totalidad por ser declarados reincidentes", explicó Rodolfo Moure, titular de la Fiscalía Descentralizada Local a la prensa.
UNO DE LOS LADRONES, ESPOSO DE LA EMPLEADA DOMESTICA
El caso fue estremecedor no solo por la violencia sino porque posteriormente se confirmó que Juárez era el esposo de la empleada doméstica de las víctimas. Y Solá era un amigo al que había conocido en la cárcel de Batán, de donde poco antes habían egresado ambos.
"La noche del robo fue horrible, es algo que recordarlo me pone muy mal. Me angustia. En todo momento pensé que nos iban a matar. No nos dejaban mover. Yo pedía por mi vida pero ellos nada, ni un vaso de agua, nada", declaró la mujer.
Juárez y Solá atacaron a golpes a la mujer con más intensidad que al hombre hasta mania tarlos a ambos de pies y manos. Con esa ventaja intimidatoria y de violencia lograron alzarse con dinero, un revólver, teléfonos y varias joyas, entre ellas las alianzas de casamiento del año 1956.
Los dos delincuentes huyeron por la puerta principal y, debido a que fue de madrugada, no hubo más testigos de su presencia allí que las propias víctimas.
LA CLAVE PARA SU ESCLARECIMIENTO
El elemento primordial para que los investigadores dieran con los ladrones lo generó la empleada doméstica. Inicialmente declaró que se enteró de lo ocurrido al día siguiente, al llegar a la casa de los jubilados a trabajar, y que tanto su pareja como el "Oreja" Solá se habían quedado durmiendo toda la noche del hecho con ella.
Pero poco después la mujer reconoció amenazas y contó algo temerario: el mismo día en que ocurrió el brutal asalto, Solá había estado en su casa y comenzó a hacerle preguntas sobre el matrimonio Vismara. Ella respondió sin "darse cuenta" e incluso Solá llegó a preguntarle si los "viejitos usaban alianzas". Conforme la mujer le respondió que sí y le repreguntó para qué quería saber eso, Solá le contestó que para saber si "los habían robado antes".
Moure y la Policía de Investigación establecieron que la mujer, que asistía a los jubilados varios días a la semana, había dado alojamiento poco antes, en su casa de calle 112 y 21, a su marido y a un amigo carcelario, Solá, quien residía en Mar del Plata.
LA HUIDA
La relación entre Juárez y Solá y el asalto fue cuestión de horas. Cuando la Policía se dispuso a detenerlos, ambos habían partido para Mar del Plata. Poco después, al regresar Juárez fue interceptado en la estación de ómnibus. Tenía casi 5.000 pesos y un trozo de cadena perteneciente a las víctimas. Además calzaba un par de zapatillas nuevas que, dijo entonces, haber recibido de Solá.
Este fue atrapado al día siguiente en cercanías de su vivienda. Los efectivos policiales le secuestraron algunas joyas pertenecientes a Vismara.
En tanto, a la empleada doméstica no se le pudo imputar ningún grado de participación en el hecho y por eso es que a juicio solamente llegaron los dos hombres, quienes por consejo de sus defensores acordaron la modalidad abreviada.
El juez del Tribunal Oral y Criminal N°2 de Mar del Plata, Roberto Falcone, rubricó el acuerdo de partes y avaló la condena de 4 años y 6 meses de prisión para ambos.