Al maestro, con cariño
Juan Ignacio posa, dentro del Museo Fangio, con el cuadro que pintó en honor a su ídolo y que donó al Museo
Juan Ignacio Canedo el pequeño que, siendo pese a su corta edad (apenas 4 años) ferviente admirador de Juan Manuel Fangio, a principios de año envió una carta a los Reyes Magos pidiéndoles un auto a escala de los que corriera "El Chueco", estuvo el pasado sábado en Balcarce.
Como se recordará, en enero la carta del pequeño llegó al Museo Fangio y poco después llegó a manos del niño una maqueta de una de las joyas mecánicas que condujera el quíntuple campeón mundial de Fórmula Uno, nada más y nada menos que el legendario "Flecha de Plata"
Esto no hizo más que aumentar su devoción por el "mundo Fangio", aquella que nació de escuchar las historias que le cuentan su abuelo y su padre, y ver y rever todas las revistas, videos y cuanto esté relacionado con su ídolo que llegue a su manos.
El sábado pasado Juan Ignacio volvió (ya había estado antes) a pisar el "templo del ruido en silencio", ese que parece ser su lugar en el mundo, para embelesarse ante cada auto, cada objeto que hay allí.
Y dando una nueva muestra de su pasión fierrera trajo un cuadro pintado por él. Un auto de carrera en medio de la pista; obviamente un auto de Fangio, que donó al Museo.
Su obra va a estar en una de las vitrinas para que todo el que lo visite la pueda admirar.
Sorprendido por tener un admirador de Fangio de tan corta edad, Alfredo Safe, gerente de la institución que recibió de manos del niño el cuadro comentó: "Es una alegría inmensa. Nos sentimos muy halagados. Tras recibir su carta le enviamos una maqueta del Flecha de Plata, y ahora nos encontramos con esta sorpresa de que había hecho una pintura que quería entregar personalmente a la Fundación. Es admirable que un chico de tan corta edad tenga tanta devoción por Fangio. El cuadro va a exhibirse en una vitrina del Museo".
